_
_
_
_
_
Reportaje:EL VIAJERO HABITUAL

El pico del Teide, a un palmo de mi nariz

Internet ofrece páginas 'web' cada vez más detalladas y espectaculares

Isidoro Merino

De la puerta de su casa a la isla de Pascua en un suspiro. Un vuelo por las dunas del mar de Arena, en el Sáhara, para sentirse como Ralph Fiennes en El paciente inglés. O un largo viaje tras las huellas de Marco Polo por la Ruta de la Seda, pero sin arriesgarse mucho. Antes de emprender el viaje puede comprobar si le atrae este fiordo noruego más que ese otro, si la foto del folleto es fiel a la playa que se va a encontrar o si el hotel elegido les ha gustado a otros turistas. ¿Cómo? Visitando las cada vez más innovadoras webs para viajeros.

VER CON TODO DETALLE

Los programas cartográficos conocidos como SIG (sistemas de información geográfica) están hoy al alcance de cualquiera; son gratuitos, espectaculares y fáciles de usar. La estrella de este mundo virtual es Google Earth (http//earth.google.es), un impresionante atlas tridimensional que -tras instalar un programa gratuito en el ordenador- permite acercar o alejar la Tierra, sobrevolarla y explorar ciudades y paisajes (y distinguir objetos de hasta 10 centímetros). La cuarta versión tiene una cobertura de alta resolución del 80% de la superficie terrestre. También se puede previsualizar una ruta entre dos ciudades casi con tanto realismo como si se estuviese conduciendo un coche.

Otros programas aprovechan la plataforma de Google Earth para situar información viajera: fotografías, alojamientos, gasolineras, tiendas, carreteras... Se puede, por ejemplo, cruzar información con otras aplicaciones -como Wikilok (www.wikiloc.com), un trazador de rutas con GPS, o SIGPAC (http://sigpac.mapa.es), que incluye el registro de fincas rústicas de España-, añadir y ver comentarios sobre un hotel o viajar en el tiempo superponiendo antiguos mapas a los actuales. Las posibilidades son infinitas.

Panoramio (www.panoramio.com) localiza en las imágenes de Google Earth más de 1,3 millones de fotografías de todos los rincones del planeta, captadas por viajeros o residentes locales. Una señal indica el lugar desde donde fue tomada cada foto. Creado en octubre de 2005 por los españoles Joaquín Cuenca y Eduardo Manchón, se ha convertido en todo un referente con 350.000 visitas diarias. En la misma línea que Google está Microsoft con su Virtual Earth (www.microsoft.com/virtualearth), menos espectacular, pero con la ventaja de no requerir que se copie ningún programa en el ordenador.

La empresa española Geovirtual (www.geovirtual.com) ha desarrollado un software para competir con Google Earth en el terreno de los proyectos comerciales de encargo; el programa se puede descargar gratis de Internet, aunque sólo está operativo para zonas concretas. Al igual que ocurre con Google Earth, sobre el terreno van apareciendo diversas capas y señales informativas que conducen a galerías de imágenes y contenidos turísticos. De hecho, la promoción turística es la principal aplicación del sistema, que ya ha sido adoptado por organismos como la Diputación Foral de Vizcaya, que ofrece vuelos virtuales en su web.

Boletín

Las mejores recomendaciones para viajar, cada semana en tu bandeja de entrada
RECÍBELAS

La empresa QDQ Media, que ya contaba con callejeros fotográficos de siete ciudades españolas, acaba de lanzar Madrid 3D, su segundo callejero tridimensional, que puede consultarse gratuitamente a través de la dirección www.qdq.com. El programa permite moverse entre calles y edificios y localizar los hoteles, restaurantes, tiendas y otros negocios en las proximidades de una dirección concreta.

De que todo es relativo dan fe los atlas de Worldmapper (www.worldmapper.org), donde los países y continentes se encogen o se estiran en función de su población, nivel de riqueza, tasas de natalidad y otros datos estadísticos.

Las webs de Michelin (www.viamichelin.es) y Campsa (www.guiacampsa.com) combinan mapas, itinerarios y callejeros con la información turística de sus guías en papel.

Otras, como Gutenkarte (www.gutenkarte.org), proponen maridar geografía y literatura creando una ruta automática a partir de la información geográfica contenida en una novela o un texto periodístico. Se pueden seguir, por ejemplo, las aventuras de Phileas Fogg en La vuelta al mundo en 80 días; Historia de dos ciudades, de Dickens; El corazón de las tinieblas, de Conrad, o Las aventuras de Huckleberry Finn, de Mark Twain, en sus mapas respectivos.

LOS VIAJEROS DAN CONSEJOS

El boca a boca -"este hotel está muy bien", "a este otro, mejor no vayas"- funciona a través de los blogs (o weblogs, o, en traducción libre al español, bitácora), foros y chats especializados. Especialmente útiles son aquellos creados por los que en inglés se conocen como travel insiders, residentes y expatriados que facilitan información actualizada y de primera mano sobre los destinos.

Es el caso de Héctor García, alias Kirai (www.kirainet.com), un alicantino residente en Japón que dedica varias horas al día a mantener su bitácora y contarnos, por ejemplo, a cuánto está el kilo de naranjas (se venden por unidades, a un euro la pieza) en Tokio, o darnos la dirección de un restaurante ninja que acaba de descubrir en las afueras.

Yolanda Vila y Toni Pozo, dos viajeros barceloneses, gestionan Viatgeaddictes (www.viatgeaddictes.com), una web trilingüe (español, catalán e inglés) con más de 100 guías y relatos on line, además de consejos prácticos sobre los destinos y enlaces a otras direcciones turísticas. Más de 10.000 narran sus experiencias en primera persona en Travelblog (www.travelblog.org), una comunidad de viajeros que tiene su equivalente en español en Viajeros (www.viajeros.com).

PEP MONTSERRAT

OTRAS 'WEBS' ÚTILES

LA PRIMERA PARADA de cualquier viaje es Google. En menos de un segundo, el buscador más potente y popular de Internet le devolverá 782 millones de entradas si escribe la palabra "travel" (viaje o viajar, en inglés), y más de 83 millones de enlaces si se limita a escribir "viajes" en español.Ante tan abrumador volumen de información, lo más práctico es manejarse con unas pocas páginas conocidas y actualizadas. Se puede empezar por la web de la editorial australiana Lonely Planet (www.lonelyplanet.com), que ofrece versiones resumidas (en inglés) de sus prestigiosas guías de papel para viajeros independientes, más un foro y un tablón de anuncios organizados por temas y destinos. Entre sus novedades recientes están los documentos sonoros gratuitos para reproductores de MP3 iPod. Si lo que se buscan son cifras de población y datos económicos y políticos, se puede consultarel World Factbook de la Agencia Central de Inteligencia o CIA (www.cia.gov).El portal español Webviajes.com ofrece un listado de enlaces a las páginas de casi todas las oficinas de turismo de España, Europa y el resto del mundo, así como a las principales centrales de reservas hoteleras, agencias on line y webs de mayoristas. Antesdeviajar.com incluye recomendaciones sanitarias para prevenir problemas en las vacaciones, en especial aquellas que tienen como destino países tropicales o con una deficiente cobertura sanitaria.Para otras consultas sobre temas sanitarios, seguridad, visados y embajadas se puede visitar la página de recomendaciones para viajerosdel Ministerio Español de Asuntos Exteriores (www.mae.es) y la web en español de la Organización Mundial de la Salud (www.who.int/es/).Toandfromtheairport.com explica cómo llegar al centro de las ciudades desde los principales aeropuertos del mundo (y viceversa). Airlinequality.com es una consulta obligada para saber qué aerolíneas han sido las más valoradas por los pasajeros, en qué aviones se sirven los mejores menús, qué compañías tienen los mejores programas de entretenimiento a bordo o, en el polo opuesto, cuáles han sido incluidas en las listas negras por falta de seguridad. Y en el apartado de curiosidades, dos webs: Sacredsites.com y Showcaves.com.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Isidoro Merino
Redactor del diario EL PAÍS especializado en viajes y turismo. Ha desarrollado casi toda su carrera en el suplemento El Viajero. Antes colaboró como fotógrafo y redactor en Tentaciones, Diario 16, Cambio 16 y diversas revistas de viaje. Autor del libro Mil maneras estúpidas de morir por culpa de un animal (Planeta) y del blog El viajero astuto.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_