Lenny canta su revolución amorosa

El rock vintage es una notoria presencia en el octavo álbum de Lenny Kravitz que desde hoy está a la venta. Quizás la promesa de abstinencia sexual que recientemente hizo el cantante estadounidense explique este regreso al pasado. O quizás no. Y entonces el tono del disco, titulado It Is Time For A Love Revolution, sea una mera coincidencia entre su vida sexual y el hecho de una vez mas no necesitar de ayudas para grabar las 14 canciones que integran su último álbum.

Escrito y grabado a lo largo del último año, en distintas localizaciones desde Nueva York a Miami, París, las Bahamas y Brasil, It Is Time For A Love Revolution es el primer trabajo de Kravitz en más de tres años. El incombustible multiinstrumentista compone, produce, hace los arreglos e interpreta todos los temas del álbum. Su discográfica lanza una edición de lujo en formato digipack para conmemorar el regreso de Kravitz. Esa edición contiene un CD y un DVD, con entrevistas y videoclips antiguos e actuales.

La revista Rolling Stone no tiene dudas: en su versión estadounidense, clasifica el último trabajo de Lenny como el mejor de su carrera. "Visceral, una mezcla entre paráfrasis de rock clásico de los años 70 con lo mejor del rock de los finales de la década de 60", define el magacín. Todo esto, presentado con un estilo actual.