El teatre Arnau, mejor por dentro que por fuera
El Ayuntamiento de Barcelona, que ha comprado la sala, estudía las reformas que necesita el edificio para abrir sus puertas
Mejor por dentro que por fuera. El Ayuntamiento de Barcelona se ha llevado una sorpresa al comprobar que el interior del teatro Arnau, que recientemente ha comprado por 2,3 millones de euros a la iglesia China, no está en el lamentable estado que presenta su cubierta y fachada.
De momento, el consistorio elabora un estudio técnico de todo el edificio para ver que intervenciones arquitectónicas son necesarias. A la vez que se plantea cuál será el futuro de la sala. "Desde luego que será una sala de espectáculos, pero hace falta saber qué tipo de sala. La idea es que sea un espacio escénico polivalente también abierto al barrio", ha explicado el alcalde, Jordi Hereu, a pie de escenario.
El teatro Arnau se sumaría así a la oferta de espectáculos del Paralelo barcelonés tras la apertura esta tempoarda del Molino y el Arteria Paralel.
Tras una década de cierre, se han ido desprendiendo elementos de la fachada del Arnau. Daños que han sufrido el bar y la floristería que todavía perviven en los bajos del local. El teatro Arnau fue comprado por la iglesia China con la idea de convertilo en un centro de culto.
