Los Grizzlies, una franquicia canadiense en Memphis

Memphis ha logrado la franquicia gracias a que una importante sociedad de carreras rápidas ha puesto 100 millones de dólares sobre la mesa para asociar su nombre al pabellón y ello ha acabado por convencer a Michael Heisley, propietario de los Grizzlies, que hasta ahora jugaban en el pabellón al que daba nombre la firma automovilística General Motors. Memphis ya dispone de un pabellón, La Pirámide, con capacidad para 20.000 personas, pero que no cuenta con los palcos de lujo que constituyen una gran fuente de ingresos para los clubes de la NBA y se ha comprometido a construir uno nuevo en cuatro años.

El entrenador de los Grizzlies es Sidney Lowe, ex jugador de un nivel discreto de Indiana, Atlanta, Charlotte y Minneslota y entrenador de Minnesota entre 1992 y 1994, está dispuesto a efectuar una remodelación a fondo del equipo. Para ello ha prescindido del jugador más destacado, Abdur-Rahim Shareef, y ha apostado fuerte por Gasol y también ha reclutado en el intercambio de jugadores con Atlanta al pívot Lorenzen Wright, máximo reboteador y segundo mejor anotador de los Hawks la pasada temporada, nacido precisamente en Memphis, y el base Brevin Knight.

Además, los Grizzlies han reclutado a uno de los jugadores con más pretendientes en el draft, el ala-pívot de Duke, Shane Battier, de 21 años. Otro de los jugadores con mayor reputación de los Grizzlies es su base Mike Bibby, elegido en el segundo puesto del draft de 1998. Abdur-Rahim Shareef, máximo anotador y reboteador con una media de 20 puntos y 9 rebotes por partido, y Bibby dominan en practicamente todos los apartados de las estadísticas del equipo en el que esta última temporada ha jugado un ex jugador del Barcelona, Tony Massenburg. Otros jugadores importantes del equipo han sido Michael Dickerson, segundo máximo anotador con una media de 16 puntos por partido, Bryant Reeves, segundo máximo reboteador, con una media de seis capturas por partido.