Bellucci apura el efecto sorpresa
El tenista brasileño, que nunca había llegado a las semifinales de un Masters 1000, luchará esta tarde (19.00) con Djokovic por un puesto en la final
Los accesos a las pistas y las gradas de la Caja Mágica están repletos de carteles de ánimo a los jugadores. Los que apoyan a Rafael Nadal son la inmensa mayoría, aunque Roger Federer y Novak Djokovic también tienen sus seguidores. Ninguno hace referencia, sin embargo, a la revelación del torneo, Thomaz Bellucci (São Paulo; 1987), que se ha metido en las semifinales del torneo de Madrid. El brasileño, el número 36 del mundo, ha dejado en el camino a Tomas Berdych, el número siete, y a Andy Murray, el número cuatro. Toda una proeza, puesto que nunca hasta ahora había logrado ganar a un top cinco y solo una vez había superado a uno de los diez mejores, cuando en febrero derrotó a Fernando Verdasco en Acapulco. Esta tarde luchará contra Djokovic por un puesto en la final. Si lo logra, se meterá entre los 20 mejores tenistas del mundo.
"Es un especialista en tierra batida que ya ha ganado a cabezas de serie. Será un partido interesante", avisó ayer el tenista serbio. Bellucci, un zurdo que ha ganado el 93% de sus juegos de saque (38 de 41) está crecido. "Djokovic es un adversario muy duro, como Murray, como Berdych y como los otros dos que gané. Hay que pensar partido a partido, bola a bola, golpe a golpe y creo que si sigo jugando así tengo oportunidades de ganar también. Puedo vencer a cualquier jugador", aseguró el brasileño tras dejar a Bredych en la cuneta. Es la primera vez que se cuela en las semifinales de un Masters 1000. "La arcilla es su territorio. Será interesante ver cómo se desenvuelve", dijo Federer.
Djokovic no se lo pondrá nada fácil. El serbio está haciendo una temporada soberbia, en la que ya ha ganado cinco títulos. Lleva 32 partidos consecutivos sin perder y busca su primera final en el torneo de Madrid. Es uno de los dos Masters 1000 en el que todavía no ha jugado la final, junto al de Shangai. El tenista serbio subraya que todas esas cifras no le presionan. Más bien al contrario. "Me motivan aún más para seguir ganando. Siempre trato de pensar en ganar, nunca en no perder. Eso es lo que me hace jugar bien", reconocía ayer tras vencer a Ferrer en cuartos. La revelación Bellucci le pondrá a prueba.
