Un gol para Cassano

Fue un gol celebrado porque valía la clasificación del equipo para los octavos de final de la Champions, pero fue, también, un gol triste, un gol bien emotivo. La diana de Ibrahimovic -el Milan empató (1-1) a domicilio ante el BATE Borisov- sirvió para homenajear al Talentino.

Tras una jugada de Robinho personal, rematada por Ibra, Boateng lideró el sentir del grupo. Primero, se abrazó al sueco; después, se quitó la camiseta y enseñó otra zamarra rossonera con el número 99, el número de Antonio Cassano. Todo el equipo se juntó alrededor del ghanés para homenajear al delantero, que sigue hospitalizado después de que el sábado pasado sufriera mareos, pérdida de la visión y del habla. El Milan emitirá hoy un comunicado oficial sobre la salud del exmadridista, aunque todos los periódicos italianos concuerdan en afirmar que lo que sufrió el delantero fue un ictus isquémico transitorio (un accidente cerebrovascular por falta de riego sanguíneo).

Sus compañeros, en cualquier caso, le dedicaron el gol, pero no pudieron brindarle la victoria. Distraídos por las noticias sobre su compañero -"lo ocurrido a Antonio nos afectó a todos y condicionó la preparación al duelo de hoy", declaró tras el partido el medio Ambrosini-, no consiguieron rematar un duelo que tenían controlado gracias a la estupenda noche de Robinho. El brasileño fue un problema para el BATE, que sufrió su movilidad durante todo el partido; suya fue la asistencia para el gol de Ibrahimovic. Sin embargo, le faltó a Robinho acierto cara a portería; desperdició tres ocasiones claras, bien por las grandes intervenciones del meta Gutom, otro protagonista de la noche; bien por el poste que rechazó uno de sus intentos. El BATE, que ante el otro grande del grupo, el Barcelona, se había derretido (0-5), supo aguantar esta vez los arreones rivales y aprovechó una de las pocas ocasiones de las que disfrutó. Abate empujó dentro de su área a Kontsevoi y el brasileño Bressan concretizó la pena máxima.

El resultado aplazó solo de un par de horas el pase a los octavos de final de los italianos, que tuvieron que esperar la victoria del Barcelona contra el Viktoria Plzen (0-4). El empate, sin embargo, obligará a los de Allegri a buscar la victoria en San Siro ante los azulgrana si quieren clasificarse como primeros del grupo H.

Resultados: BATE Borisov, 1 - Milan, 1; Viktoria Plzen, 0 - Barcelona, 2. Clasificación: Barcelona, 10; Milan, 8; BATE, 2; y Viktoria Plzen, 1.

El Chelsea se despista

Convaleciente todavía por el varapalo en el derbi de Londres del pasado sábado contra el Arsenal (3-5), el Chelsea fue incapaz de superar al Genk, rival menor para su talonario y aspiraciones. Si bien se adelantó con un tanto de Ramires tras una conexión con Torres -tercera asistencia del español en esta Champions-, luego desperdició un penalti en botas del central Davi Luiz y, finalmente, encajó una diana de Vossen, pichichi de la liga belga el curso pasado. Empate definitivo (1-1) y los blues deben aguardar a su pase definitivo en el Grupo E. Sobre todo porque la victoria del Valencia ante el Leverkusen (3-1), complica ahora su camino.

Resultados: Genk, 1 - Chelsea, 1; Valencia, 3 - Bayer Leverkusen, 1. Clasificación: Chelsea, 8; Bayer, 6; Valencia, 5; y Genk, 2.

El asombroso Apoel

Las sorpresas más grandes pueden llegar del grupo G, en el que el Shakhtar Donetsk y el Oporto, -el curso pasado cuartofinalista de la Champions y campeón de la Liga Europa, respectivamente- están al borde de la eliminación en beneficio del Zenit y del cada vez más prodigioso Apoel de Nicosia. Prácticamente condenados están los ucranios de Mircea Lucescu, que han sumado hasta ahora dos empates y dos derrotas -la segunda, ayer en el campo del Zenit (1-0)-. Un cabezazo del defensa belga Lombaerts en el descuento de la primera parte decidió el encuentro e impulsó las esperanzas de los campeones de Rusia, segundos del grupo detrás del Apoel. Los chipriotas, entrenados por el serbio Ivan Jovanovic, conquistaron su segunda victoria -la primera e histórica fue contra el Zenit- ante los campeones de Portugal (2-1) y lideran el grupo, invictos. El héroe de la noche fue el brasileño Manduca, ex del Benfica, eterno rival del Oporto, que marcó, a la contra, el gol de la victoria en el tiempo de descuento. Antes, los también brasileños Ailton y Hulk habían anotados sendos penalti.

Resultados: Zenit, 1 - Shakhtar, 0; APOEL Nicosia, 2 - Oporto, 1. Clasificación: APOEL, 8; Zenit, 7; Oporto, 4; y Shakhtar, 2.

El Borussia Dortmund se levanta

En el grupo F el Borussia Dortmund vuelve a meterse en la pelea por acceder a los octavos de final tras ganar al Olympiacos con un derechazo desde fuera del área de Grosskreutz. Les bastó a los campeones de Alemania para sumar la primera victoria del curso en la Liga de Campeones, convertir a los griegos en colistas y acercarse al Arsenal y el Marsella, que empataron (0-0) en Londres.

Resultados: Arsenal, 0 - Marsella, 0; Dortmund, 1 - Olympiacos, 0. Clasificación: Arsenal, 8; Marsella, 7; B. Dortmund, 4; y Olympiacos, 3.