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ECOLOGÍA

Los expertos creen que sólo se salvará el 10% de estos árboles en toda España

Carlos Herranz Cano, ingeniero jefe del Servicio de Jardines, Parques y Montes del Patrimonio Nacional, conocedor de la plaga que afecta a los olmos, ha asegurado que, observando la experiencia de lo ocurrido en el Reino Unido, "no se puede aspirar a salvar en toda España mas allá de un 10% de sus olmos, y el pretender ser más ambiciosos en este tema puede suponer una dispersión de los trabajos que haga inútil la lucha y se pierdan todos nuestros olmos".Los tratamientos contra la enfermedad, dice Herranz Cano, se pueden agrupar en dos líneas: una, el tratamiento específico del hongo en el árbol enfermo, y otra, la prevención del contagio de la enfermedad en árboles sanos.

El tratamiento del hongo, en aquellos olmos que no están afectados en más del 5%, tiene buenas posibilidades de éxito. En los olmos afectados entre el 5% y el 20% de su ramaje tiene sólo algunas, por lo que sólo se debe aplicar en olmos de especial importancia, y en aquellos con una infección superior al 20% no existe ninguna posibilidad de salvación.

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Tratamiento costoso

El tratamiento consiste en inyectar en los vasos conductores del árbol productos fungicidas (exterminadores de hongos) muy diluidos en grandes cantidades (del orden de 100 a 150 litros para un olmo grande), lo que hace muy costoso el tratamiento.

Los tratamientos preventivos van encaminados, por un lado, a evitar la propagación de la enfermedad mediante insecticidas aplicados en la época de vuelo de los escolítidos (un tipo de insecto).

Otra parte de los tratamientos preventivos consiste en cortar los árboles enfermos sin posibilidades de salvación, quemando sus ramas y ramillas, descortezando el tronco y tratándole con fungicida, para evitar que el hongo y los insectos que están albergados en el olmo puedan propagar la enfermedad en las zonas próximas.

Teniendo en cuenta que el vuelo normal de un escolítido se calcula que no llega a más de tres kilómetros, para mantener adecuadamente aislada una olmeda se precisa un área barrida de olmos en su rededor de, por los menos, la referida distancia.

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