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GUERRA EN EL GOLFO

Turquía cierra el oleoducto que transportaba el petróleo iraquí al Mediterráneo

El petróleo iraquí ha dejado de circular por Turquía. El Gobierno de Ankara anunció ayer que había cerrado el oleoducto que transportaba el crudo iraquí hasta la terminal de Yumurtalik, en el Mediterráneo oriental. "No habrá más cargamentos de petróleo" aseguró ayer el presidente turco, Turgut Ozal, quien tomó esta decisión de acuerdo con el embargo declarado el lunes por la noche por el Consejo de Seguridad de la ONU contra Irak, que en la madrugada del pasado jueves invadió y ocupó Kuwait. Entre tanto, el Gobierno títere implantado por el ejército de Sadam Husein en el rico emirato petrolífero proclamaba la República. "El régimen monárquico ha sido abolido para siempre", afirmaba el comunicado difundido por la televisión de Bagdad.

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De los dos oleoductos que transportaban diariamente a través de Turquía 1.600.000 barriles de petróleo, Irak cerró el lunes uno de ellos y redujo el caudal del otro a un 30% de su capacidad. Fuentes diplomáticas aseguran que Turquía, miembro de la OTAN, optó por cerrar completamente el oleoducto ante las presiones norteamericanas. Ankara ha asegurado que con ello se sumaba a las sanciones occidentales contra Irak, pero que no autorizará que las bases militares estadounidenses en su suelo sirvan de apoyo a un eventual ataque contra Irak.Una escuadrilla de bombarderos F-111 se trasladó a última hora del lunes desde una base del Pentágono en el Reino Unido a otra en Turquía, Incirlik. Fuentes de la base aérea de Torrejón (Madrid) declararon que varios de sus aparatos se habían desplazado también a la zona. País fronterizo con Irak, Turquía se ha visto plenamente envuelta en la crisis del Golfo. El presidente Turgut Ozal ha estado en continua comunicación con los principales implicados, desde el presidente iraquí, Sadam Husein, hasta el depuesto emir, Yaber al Ahmad al Sabah, pasando por el presidente norteamericano, George Bush, y el rey Fahd de Arabia Saudí.

El Estado Mayor internacional de la OTAN declaró anoche que Irak continúa concentrando tropas a lo largo de la frontera con Arabia Saudí. Aunque el régimen de Bagdad ha negado repetidamente que tenga intenciones de invadir a su vecino, Washington desconfía de su palabra y analiza las eventuales medidas a tomar en caso de que se produzca ese ataque.

El jefe del Pentágono, Richard Cheney, que viajó el lunes a Arabia Saudí con una numerosa delegación de militares y expertos en cuestiones estratégicas, analizó ayer con su homólogo saudí la situación. Posteriormente, viajó al puerto egipcio de Alejandría para entrevistarse con el presidente Hosni Mubarak.

Sadam Husein se justifica

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La actividad diplomática de la región continúa a toda marcha para tratar de encontrar una salida antes de que una nueva aventura de Sadam Husein provoque una intervención de Estados Unidos. El líder iraquí, sin embargo, parece haberle vuelto la espalda a sus aliados más moderados, que le aconsejan una retirada inmediata del emirato.

Sadam, en un mensaje dirigido a la nación a través de la televisión, justificó anoche la invasión de Kuwait que, subrayó, "puso fin el reparto colonial" y fue consecuencia de la "victoria sobre Irán". Añadió que se ha eliminado un régimen que había dado la riqueza a. unos pocos y la pobreza a la mayoría. También para anoche estaba prevista la sesión extraordinaria del Parlamento iraquí.

Sadam Husein recibió en Bagdad al jefe del Gobierno Provisonal, de Kuwait Libre, coronel Alá Husein Alí. La agencia oficial iraquí INA señaló que durante las conversaciones mantenidas por los dos dirigentes, el líder iraquí prometió a su protegido que "rechazará con firmeza cualquier tentativa imperialista-sionista que trate de atacar al levantamiento popular de Kuwait o de dañar a la nación árabe".

Rehenes

La decisión de Sadam de tomar como rehenes a numerosos residentes occidentales en Kuwait ha llenado de preocupación a los Gobiernos afectados. España, el Reino Unido, Holanda, Italia, la República Federal de Alemania y Estados Unidos han visto cómo sus ciudadanos eran transferidos desde Kuwait a Bagdad por os soldados iraquíes.

Las tropas invasoras entraron en los hoteles kuwaitíes donde se encontraban los extranjeros y tomaron a unos 200 de ellos, entre los que se encuentran algunos de los pasajeros de un avión de la British Airways que realizaba el vuelo Londres-Madrás (India), con escala en el emirato, y que durante ésta fue abordado por los soldados iraquíes. Washington decidió reducir al mínimo el personal de sus Embajadas en Kuwait y Bagdad. El Gobierno jordano se ha comprometido a facilitar la evacuación de los diolomáticos,

La frontera jordana se encuentra a unos 270 kilómetros de la capital iraquí. Un grupo de 22 japoneses, después de ser conducido a Irak, fue autorizado a dejar el país en un autobús que los condujo a Turquía. Debido al período vacacional, en el momento de la invasión, el pasado miércoles por la noche, no se encontraban en Kuwait más que 200 japoneses de los 400 que hay habitualmente.

El emir depuesto, por su parte, trata de convencer a Occidente de la conveniencia de acabar con el "loco de Babilonia". Emisarios suyos han sido enviados a diferentes capitales en un intento por convencer a Siria de que ataque a su vecino iraquí.

La falta de preparación de Occidente para hacer frente a una crisis del petróleo como la iniciada en 1973 y el miedo a sumergir al mundo en una recesión pueden hacer que se vuelva contra Irak la lección que quiso a dar a su hermano pequeño.

Fuentes jordanas aseguran que la población de Bagdad ¡nicíó el lunes una serie de pruebas y entrenamientos de evacuación para estar preparada en caso de un hipotético ataque. Los afiliados al partido gobernante, Baaz, recibieron armas y entrenamiento para aprender a utilizarlas.

"El levantamiento contra el régimen de Kuwait, corrupto y agente del imperialismo, no tiene como objetivo una reforma limitada sino un cambio fundamental", señala el comunicado del Gobierno provisional de Kuwait difundido anoche por la televiiraquí.

La composición de este Gobierno, integrado por nueve militares, fue anunciada por Bagdad a los tres días de la invasión. Irak no ha vuelto a decir palabra alguna sobre su supuesta retirada del emirato, que anunció a bombo y platillo el domingo. Tanto en medios árabes como occidentales se considera que Irak está afianzando su presencia militar en ese país y que, hasta el momento, no ha habido retirada alguna sino simples movimientos de tropas.

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