_
_
_
_
_
GUERRA EN EL GOLFO

División en la familia árabe

El mundo árabe ha recibido con la invasión iraquí de Kuwait la puñalada por la espalda que cada uno de los países espera de los otros. El esfuerzo de años por construir una base de confianza y solidaridad se ha venido abajo y ha abierto una profunda brecha que ha dejado a lafamilia árabe dividida en dos.Jordania y Egipto, que en los últimos tiempos habían logrado una importante cooperación, han vuelto a las viejas peleas. El rey Hussein ha acusado a Hosni Mubarak de apoyar la propuesta de la Liga Árabe que condenaba a Irak, después de que ambos jefes de Estado se comprometieran a impedir cualquier resolución en esos términos.

Según Hussein, la condena de Irak "complicaría las cosas, impediría la celebración de la minicumbre de Yedda y abriría la vía para una intervención extranjera". Mubarak señaló ayer, a través de uno de sus portavoces, que él no era quién para impedir la resolución de la Liga y que no estaba de acuerdo con la reunión en la ciudad saudí porque "no se han puesto las bases y principios necesarios para asegurar el éxito".

Más información
Bush envía tropas y aviones para proteger a Arabia Saudí de un ataque de Irak

La invasión iraquí ha servido para recordar a unos y a otros odios ancentrales escondidos tras la sombra del enemigo común: Israel. Así, el depuesto emir de Kuwait no dudó en llamar por teléfono al presidente de Siria, Hafez el Asad, para pedirle ayuda contra Sadam Husein. De los 19 países de la Liga Árabe, 13 votaron a favor de la condena. Jornania, Sudán, Yemén y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) lo hicieron en contra y Yibuti y Libia no.estaban presentes en el momento de la votación.

El gran perdedor

Para el líder libio, Muanimar el Gaddafi, ésta era una ocasión de oro para acabar con el aislamiento que ha sufrido y, escurriéndose como un pez, apareció horas después con un plan de paz. El dirigente palestino Yasir Arafat, el gran perdedor a que ar su causa nuevamente olvidada, es quien se encarga de convencer a sirios y troyanos de los beneficios que traerá para todos este plan de paz.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

De Bagdad a Riad, pasando por todas las capitales árabes y especialmente por Ammán y El Calro, el plan que Arafat lleva bajo el brazo se basa en cuatro puntos: retirada total de las tropas iraquíes a las fronteras anteriores al primero de agosto; apoyo a la reconstruccion de a economía iraquí; reconocimiento de que los kuwaitíes son los únicos que tienen derecho a elegir su Gobierno; y formación de un comité árabe que reúna a Egipto, Arabia Saudí, Kuwait, Emiratos Arabes Unidos, Jordama, Irak y Yemen. Este comité estaría encargado de formar una. fuerza conjunta árabe que protegería las preciadas vías de agua y organizara el paso a través de ellas.

Hasta el momento nada ha trascendido sobre el eventual apoyo a este plan que, sin duda, será inaceptable para las monarquías conservadoras, muy poco predispuestas a someterse a la voluntad popular.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_