_
_
_
_
_

"Me siento con ánimo y firmeza para rivalizar con González"

Pregunta. El Congreso del CDS ha dado como resultado un equipo dirigente cuyos miembros habían rivalizado, y que por un sistema electoral peculiar tienen ahora que cohabitar y aplicar una ponencia política que además no es la de ninguno de ellos. ¿Cree que esto va a ayudar al CDS a recuperar credibilidad como partido serio?Respuesta. El antagonismo que se supone entre Fernández Teixidó y yo no existe. Los dos hemos estado en una línea renovadora y de cambio. Yo voy a disipar inmediatamente una preocupación que me parece exagerada y voy a proponerle hoy mismo [por ayer] a Teixidó la publiación de un artículo conjunto.

P. ¿Pero qué garantía de estabilidad puede ofrecer este equipo dirigente cuando usted había confiado en Rafael Arias Salgado para secretario general y quien ha resultado elegido le acusaba a usted de neopresidencialista?

Más información
Los dirigentes derrotados del CDS se desmarcan de la nueva dirección 24 horas después del congreso

R. Efectivamente, se hizo esa afirmación, pero creo que ha quedado claro en el congreso que no soy presidencialista, que defiendo que los grandes poderes tienen que estar en el comité federal y en el comité ejecutivo.

P. ¿Con el desarrollo del congreso y su acceso a la presidencia del CDS se pone fin al suarismo?

R. Es una pregunta interesante. Si el suarismo ha sido una adscripción política sólo en base a la persona de Suárez, evidentemente el suarismo habría terminado; si lo que se entiende es la adscripción al centro liberal y progresista, el suarismo sólo es una frase con escaso sentido.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

P.¿Quién debe personalizar, a su juicio, ante la opinión pública y a partir de hoy al CDS?

R. Efectivamente, tenemos planteada esa cuestión. Yo no soy diputado, soy eurodiputado, y eso me imposibilita ser portavoz en el Parlamento. En todo caso, el presidente del CDS no va a ser meramente un símbolo.

Un congreso áspero

P. ¿No cree que el desarrollo del congreso ha mostrado un enorme enojo, por no decir distanciamiento, de la militancia respecto a Adolfo Suárez?R. Creo que es una exageración, que no ha sido así. La militancia del CDS está disgustada porque hemos tenido unos malos resultados electorales y cuatro meses de debates precongresuales muy duros. Eso es lo que ha hecho el congreso muy áspero. Pero no creo que Adolfo Suárez haya perdido estima.

P. Pero el que haya sido elegido usted presidente y no el candidato público de Suárez, ¿no es una desautorización de lo que se suponía era la autoridad moral y política de Suárez?

R. En principio podría pensarse que es así. Pero me parece que el fenómeno ha sido más complicado. En este congreso no iba nada atado y las decisiones han surgido minuto a minuto. No es que se haya rechazado la recomendación de Suárez, sino que han pesado más los factores plásticos, del momento, más estridentes, si se puede decir así.

P. ¿Por qué fue imposible el acuerdo entre usted y Morodo?

R. El partido ha tenido una imagen de zigzagueante y ambiguo. Si en el último minuto yo hubiese retirado mi candidatura habría lesionado la imagen del partido, porque habría tenido que romper el compromiso con más de 400 compromisarios y seguiría pareciendo que el CDS no cambiaba, que es posible cualquier rectificación.

P. Para definir su firmeza dijo que se podía reconstruir el CDS sobre una humilde piedra. ¿Se considera una roca?

R. Dije "sobre una humilde piedra, sobre una roca, también humilde". Me definiría como firme. El término roca me parece demasiado presuntuoso, aunque sería muy elogiosa para mí. Soy una persona que piensa muchísimo las cosas y que está muy atenta a lo que dicen sus críticos.

Realismo frente a fervor

P. Parece que usted comparte la tesis de su amigo Rafael Arias Salgado de que se ha acabado la época de los liderazgos carismáticos, de Fraga, Carrillo o Suárez, y que es el momento de dirigentes más grises y también menos personalistas.R. Sí, comparto esencialmente ese análisis. No sé exactamente lo que es una persona gris, pero creo que en mi caso buscaré la solución de los problemas no desde el fervor y del carisma, sino desde la reflexión, la racionalidad y el realismo, que son mis herramientas.

P. ¿Esas herramientas le dan seguridad para convertirse en candidato a presidente del Gobierno si Suárez no se siente con fuerzas para serlo él?

R. Las elecciones están lejos. Lo principal es el fortalecimiento del partido y ofrecer propuestas políticas de calidad. Estoy dispuesto a asumir las responsabilidades necesarias con las que mi partido esté de acuerdo. Me siento con ánimo y Firmeza para hacer lo necesario.

P. Citaba antes la trayectoria zigzagueante del CDS. ¿Qué le pareció peor: los pactos municipales con el PP o la alianza parlamentarla con el PSOE?

R. No fue un error sobre una cuestión sencilla. La política de alianzas ha traumatizado y dejado una profunda herida en el partido, así que en adelante tendremos sumo cuidado. Es probable que recorramos un largo camino sin pactos. Respecto al que hicimos con el PSOE, la gran pregunta ha sido si el CDS obtenía contrapartidas suficientes.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_