Aznar insiste en pedir "elecciones inmediatas para pasar la página"
"El interés de España exige unas elecciones inmediatas, la formulación de una mayoría clara, un Gobierno fuerte y pasar la página de la actual situación". José María Aznar insistió varias veces en esta demanda en el discurso que pronunció en las alturas del monte Faro, con motivo de la romería que anualmente organiza el PP gallego y que ayer cumplió su cuarta edición. Toda la Xunta, alcaldes, diputados y otros significados cargos del partido conservador en Galicia, participaron en esta romería política. Los organizadores cifraron la afluencia en 20.000 personas, pero con criterios más realistas habría que limitar la asistencia a la tercera parte.El líder del PP llegó a primera hora de la mañana acompañado de los miembros de su Ejecutiva Francisco Álvarez Cascos, Rodrigo Rato y Mariano Rajoy.
Desayuno con Cuiña
En anteriores ediciones de la romería Aznar había pasado la noche en Lalín, en el domicilio particular de José Cuiña, secretario general del PP gallego y principal mentor de la romería. El vecindario de la comarca, identificada como la genuina Galicia profunda, suele referirse a esa casa como Falcon Crest por su opulencia. En esta ocasión, Aznar sólo acudió a ella para desayunar con Cuiña antes de emprender la subida al monte con Fraga.
A esa hora, mediodía, el ambiente ya estaba en su esplendor, animado por grupos de gaiteiros y centenares de tenderetes que repartieron toneladas de viandas típicas: empanada, pulpo, carne ao caldeiro... "Esta de las pulpeiras y churreiras es la Galicia auténtica", dijo Fraga a Aznar cuando ascendían al monte. En la misa que se celebró en la cima, el oficiante invocó a las autoridades presentes para "restablecer la confianza en que los valores perennes del cristianismo no se pierdan en la sociedad".
Aznar afirmó en su discurso que "el actual Gobierno no está en condiciones de gobernar. Lo mejor para España es poner su futuro inmediato en manos de los españoles para que ellos decidan y el país pueda salir adelante. El interés de España exige elecciones inmediatas", recalcó.
El presidente del PP, en tono jovial, interrumpió su discurso para que una mujer le fotografiara y se comprometió a volver al monte Faro a bailar la muñeira "cuando sea presidente del Gobierno". Prosiguió luego censurando la propuesta de Felipe González de consultar la fecha de las elecciones generales. Tras hablar de "historias de subastar calendarios electorales", emplazó a González a disolver las camaras "si cree que no puede seguir gobernando" y consideró nada normal "pretender que durante el semestre de presidencia europea, a cuyos objetivos vamos a contribuir, se suspenda la vida política nacional".
"Barullo para ganar tiempo"
Aznar reafirmó la cohesión del PP -"enfrente no hay más que confusión, barullo y ganas de ganar tiempo", dijo- y calificó de absurdo el mensaje de CiU, porque "no conduce más que a prolongar una situación de la que hay que salir adelante ya". Criticó asimismo, como nada razonable el intento de "monopolizar el poder, quedarse en el poder, abusar del poder, a base de que todos los demás paguemos la factura de quienes están en él. Nosotros pagamos las facturas de España, pero no las de quienes están en el Gobierno".
Fraga comenzó apuntando en su turno la necesidad que siente Galicia "de un buen Gobierno, de una administración seria y eficaz, de una justicia digna de este nombre nobilísimo, de una buena política". Por eso ha luchado Galicia, añadió, "y luchará por acabar con los escándalos, con los abusos, con la política de mentiras y prepotencia, creando una mayoría natural capaz de hacer posible una política de seriedad, de continuidad, de orden y justicia, de futuro para nuestros hijos".
