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Historias domésticas

La factoría de los guionistas de teleseries se amolda a los gustos de una audiencia familiar

Rosario G. Gómez

El auge de las telecomedias españolas ha movilizado en los últimos años a un ejército de guionistas. Embarcados en la tarea de pergeñar historias para un público heterogéneo, diseñan argumentos en los que se vean reflejadas típicas familias de clase media. En algunos casos los guiones se estructúran en función de la trama; en otros se fabrican a medida de los protagonistas. A esta última categoría pertenecen Médico de familia, pensada para Emilio Aragón; Menudo es mi padre, ideada para El Fary, y Hostal Royal Manzanares, escrita para Lina Morgan. Turno de oficio II perseguía el reencuentro de Galiardo y Echanove.En ocasiones las series surgen de la idea, a veces delirante y a veces absurda, de un productor. Quienes han de perfilar los personaies y las situaciones se ven abocados a un verdadero encaje de bolillos. Para algunos guionistas resulta "más facil" escribir una serie sabiendo de antemano quién será el protagonista. Otros, sin embargo, prefieren centrarse en el argumento sin tener en cuenta a los actores.

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Jorge Barriuso y Miguel Ángel Fernández tienen sobre sus espaldas una larga lista de series. Para la factoría Frade hicieron Tres hijos para mí solo y más de 20 capítulos de Canguros. Para TVE han escrito parte de los 26 episodios de Turno de oficio II. En este caso, el equipo, coordinado por Manolo Matji, celebró numerosas reuniones previas. Se trataba de definir los personajes y las tramas en las que se verían envueltos jueces y abogados. Para ambientarse, asistieron a vistas en los juzgados de Madrid.

Fernández y Barriuso admiten que en esta serie contaron con tiempo para planificar los capítulos. Pero dada la escasa repercusión que Turno de oficio está teniendo entre la audiencia aseguran que "según la tendencia actual está visto que sólo se pueden hacer series de mesa camilla, cuyo argumento gira en tomo a familias presuntamente típicas".

Los éxitos se han aliado esta temporada con las telecomedias de corte familiar. El equipo de la compañía GECA -creadora de Menudo es mi padre y Médico de familia- ha observado que para llegar a un amplio espectro de público es preciso reflejar problemas que afectan a varias generaciones. De ahí que en estas dos series existan padres, hijos, abuelos y tíos. Así consiguen que toda la familia esté pegada al television.

Nacho Cabanas es uno de los guionistas de Colegio mayor, cuya segunda entrega está lista para ser emitida en TVE. Intervino también en la primera parte, encargada por Telemadrid hace cuatro años para su audiencia, mayoritariamente joven. La segunda fase fue coproducida por TVE, ETB y Canal 9. "Por encargo de la productora, ampliamos el target de audiencia hacia un público más familiar. Eliminamos el desmadre de la primera etapa y le dimos más realismo", dice Cabanas. Para captar a un público más amplio decidieron casar al protagonista, Antonio Resines, e incorporar a la trama a los hijos de la pareja. Se restó peso a los conflictos universitarios y se enfatizaron las relaciones familiares.

Estas situaciones se reproducen en Carmen y familia, de TVE. Inspirada en la película La estanquera de Vallecas, los guionistas crearon tres parejas con profesiones y edades diversas y entrecruzaron sus historias. Similar planteamiento se lleva a cabo en Este es mi barrio, de Antena 3, en cuyo argumento trabaja Vicente Escrivá.

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