Zülle, el más líder
La condición de favorito del suizo Alex Zülle no debería ser una sorpresa estadísticamente hablando: si alguien ha vestido más veces de amarillo en la historia de la Vuelta a España, ése es el actual jefe de filas del Banesto, que ha llevado el maillot 38 veces. Sin embargo, no lo parece o no se le reconoce: da la sensación de que Zülle es uno más de tantos favoritos. Quizás sea porque cuesta conceder ese tipo de reconocimientos a corredores todavía en activo. Debe tener ello algo que ver con cierta falta de clasicismo de la Vuelta y las dificultades endémicas que ha tenido para atraer la atención de las grandes figuras extranjeras. A todo ello hay que añadir que es una carrera mucho más joven que el Giro o el Tour (la Vuelta nació en 1935, el Tour en 1903 y el Giro en 1909). Zülle, ganador de dos Vueltas consecutivas (1996 y 1997) terminó superando el registro de su compatriota Rominger, 31 veces de amarillo, y el corredor que más veces ha ganado la Vuelta (tres, 1992, 1993 y 1994) y que más etapas contrarreloj se ha adjudicado (6) en situación de empate con el español Mauri. Así que son ciclistas contemporáneos los que ocupan los lugares de privilegio estadísticamente hablando: Olano, por ejemplo, ha vestido el mismo número de veces de amarillo que Anquetil (14) y ha ganado el mismo número de contrarrelojes que Luis Ocaña (4). Aquí, en la Vuelta, los modernos ganan a los clásicos.