El PSOE acusa a Matas de impulsar de su 'puño y letra' la captación de votos para el PP
El ministro replica que 'la jaula de grillos' del Gobierno balear está tras el 'montaje'
El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, criticó a Aznar por tener en su Gabinete 'regeneracionista' a un ministro 'presuntamente implicado en un intento de fraude electoral y de compra de voto con recursos públicos'. Aznar contestó que Matas sigue en el Ejecutivo 'porque está haciendo una buena gestión y ha presentado un buen Plan Hidrológico Nacional'. Llamazares denunció entonces la multiplicación del censo de emigrantes por tres, su apoyo mayoritario y nada casual al PP y que algunos electores de ese partido hubiesen 'salido de la tumba' para votar. El dirigente de IU remató su intervención pidiendo a Aznar la destitución de Matas.
El presidente justificó lo sucedido en Formentera en la libertad de los 74 españoles residentes en Argentina para elegir su lugar de residencia y hacer valer sus derechos en esa isla y a favor del PP. Aznar sostuvo que ninguno de los electores ha acusado al PP de manipular, aseguró que todas las comunidades fomentan el voto en Latinoamércia. Tras recordar el resultado de las últimas elecciones en Baleares: 180.000 votos para el PP, 80.000 para el PSOE y 19.000 para IU, Aznar remachó que, pese a ello, allí gobiernan seis partidos políticos contra el más votado.
Más tarde, los socialistas José Blanco, secretario de organización, y Teresa Riera, parlamentaria de Baleares, reclamaron al ministro Matas responsabilidades políticas por su actuación. Matas negó que hubiera cometido irregularidades. Blanco replicó que Matas había estado en el origen de esa operación de captación de votos. El ministro volvió a negar y aseguró que su gestión como presidente balear consistió en favorecer la recuperación de las casas regionales y la relación institucional con los emigrantes.
Riera subrayó que Matas estaba en el inicio de esta operación y esgrimió un documento, escrito por Matas, en el que se estructuran distintas actuaciones para favorecer la inscripción en el censo de emigrantes. Riera predijo que Matas acabará como su predecesor, Gabriel Cañellas, condenado por prevaricación y marginado por su partido.
