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Castro pide que Carter verifique si Cuba tiene armas biológicas

El ex presidente de EE UU inicia una histórica visita a la isla

'Hacía tiempo que esto no ocurría aquí'. El presidente cubano, Fidel Castro, de traje y corbata, se refería a los himnos nacionales de Estados Unidos y Cuba que acababan de sonar en la pista del aeropuerto José Martí de La Habana para recibir, casi con honores de jefe de Estado, al ex presidente norteamericano James Carter. Se trata de la visita norteamericana de más alto rango en 43 años de revolución. Carter fue claro sobre los objetivos de su viaje: conocer la realidad de la isla y fomentar los principios del centro que lleva su nombre, democracia, derechos humanos y lucha contra la pobreza.

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Fidel Castro le garantizó total libertad de movimientos para entrevistarse con quien quisiera, entre ellos los disidentes, y visitar las instalaciones científicas que han sido recientemente acusadas de fabricar armas biológicas. 'Pensaba que iba a venir en un Boeing', comentó el mandatario cubano a Carter, presidente entre 1977 y 1981, poco después de que éste, a las 10.45 de la mañana, hora local, aterrizase en un pequeño avión privado acompañado por su esposa Rosalynn, su hijo Chip y seis miembros más del Centro Carter.

La temperatura superaba los 30 grados y de ello se quejaron ambos líderes. '¡Hace calor, eh!', dijo Castro. Hubo un intercambio de comentarios antes de los discursos, todos conciliadores pero sin ocultar las diferencias. La estancia durará seis días. La última vez que el matrimonio Carter visitó la mayor de las Antillas fue hace 47 años, cuando gobernaba Fulgencio Batista, derrocado por Castro en enero de 1959.

'Hemos llegado como amigos del pueblo de Cuba y tenemos la esperanza de conocer a cubanos de diversas vertientes de la vida. Estamos deseosos de ver personalmente sus logros en salud, educación y cultura', dijo Carter en la tribuna montada en la terminal aérea, desde donde se veía una gran pintada que decía 'Patria es humanidad'. Otra más elocuente y famosa ha permanecido durante años frente al edificio de la Sección de Intereses de EE UU en La Habana: 'Señores imperialistas, no les tenemos absolutamente ningún miedo'. Pero el tono de esta visita no es en absoluto beligerante.

El ex presidente norteamericano tiene previsto reunirse con Castro en tres ocasiones, aunque todo indica que habrá más contactos informales. En sus primeras palabras, Carter no ocultó su decisión de reunirse con activistas de derechos humanos y disidentes el jueves próximo, día que también se encontrará con grupos religiosos. Pocos días antes de llegar a Cuba, Carter acotaba así los posibles resultados de su visita: 'No espero que este viaje vaya a cambiar al Gobierno cubano o sus políticas. Sin embargo, es una oportunidad para explorar temas de mutuo interés entre nuestros ciudadanos y para compartir ideas sobre cómo mejorar la relación entre Estados Unidos y Cuba'.

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Uno de los platos fuertes del viaje de Carter será el discurso que pronuncie mañana en la Universidad de La Habana, que será transmitido a todo el país en directo por radio y televisión, algo que sólo ha podido hacer el papa Juan Pablo II durante su viaje a la isla en enero de 1998.

Se espera que en esta alocución ante los estudiantes aborde los temas siempre conflictivos en Cuba de la democracia y los derechos humanos, a los que aludió en sus primeras palabras al llegar a La Habana. 'Apreciamos la oportunidad de reunirnos con el presidente Castro, otros miembros del Gobierno y representantes de grupos religiosos y otros, y así examinar las ideas que son importantes para Rosalynn y para mí, principios que constituyeron los cimientos cuando establecimos el Centro Carter hace 20 años: paz, derechos humanos, democracia y el alivio del sufrimiento humano'.

La invitación de Castro a Carter data de 14 años atrás, cursada en Caracas, y fue renovada durante los funerales de Pierre Troudeau (septiembre de 2000), cuando ambos fueron portadores del féretro del ex jefe del Gobierno canadiense. 'Durante los cuatro años de su presidencia usted tuvo el valor de hacer esfuerzos para cambiar el curso de las relaciones . Por eso su nombre es visto con respeto por todos aquellos que fuimos testigos de su actitud', subrayó Castro. EE UU y Cuba no tienen relaciones diplomáticas desde el 3 de enero de 1961. Ese año, la isla fue expulsada de la Organización de Estados Americanos (OEA) a propuesta de la Casa Blanca. No obstante, la administración de Carter estableció una Oficina de Intereses en La Habana, y los cubanos hicieron lo propio en Washington. Castro afirmó que no quería que la visita le crease problemas a Carter y que fuera acusado de 'antipatriota'.

El presidente cubano, Fidel Castro (derecha), ayer, en el aeropuerto de La Habana junto al ex presidente estadounidense Jimmy Carter.
El presidente cubano, Fidel Castro (derecha), ayer, en el aeropuerto de La Habana junto al ex presidente estadounidense Jimmy Carter.AP

El ex presidente se reunirá con la oposición interna

Fidel Castro introdujo una novedad en el programa que realizará Carter durante su estancia de seis días en Cuba: visitar con el personal cualificado que el ex presidentenorteamericano designe todas las instalaciones científicas de la isla en las que presuntamente se fabrican o investigan armas químicas y biológicas, según la reciente acusación del subsecretario de Estado de Seguridad y Defensa, John Bolton.

Castro ha rechazado rotundamente tales denuncias y no fue casualidad que en la lista de funcionarios cubanos que acudieron al aeropuerto ayer figurase la científica Concepción Campa, directora del Instituto Carlos J. Finlay, que produce diversas vacunas y productos farmacéuticos. Carter paseó ayer por el casco histórico de La Habana Vieja en compañía del historiador de la Ciudad, Eusebio Leal, y se entrevistó con el ministro de Asuntos Exteriores, Felipe Pérez Roque, y con la jefa de la Sección de Intereses de Estados Unidos, Vicky Huddleston, con la que las relaciones oficiales del Gobierno cubano son crispadas. Por la noche, Carter cenó con Fidel Castro en el palacio de la Revolución de La Habana, en el primero de los tres encuentros programados con el líder cubano.

Carter visitará el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, escuelas, centros de salud y cooperativas, además de la finca que el escritor norteamericano Ernest Hemingway tenía a las afueras de La Habana. El ex presidente norteamericano también pidió a las autoridades sostener un encuentro con escritores y artistas cubanos el miércoles, último día de las actividades oficiales. El jueves Carter se reunirá con grupos religiosos y activistas de derechos humanos, entre ellos el disidente Vladimiro Roca, liberado la semana pasada después de cumplir casi cinco años de prisión por 'sedición'; Elizardo Sánchez, presidente de la comisión cubana de Derechos Humanos, y Osvaldo Payá, promotor del denominado Proyecto Varela, que ha reunido 11.000 firmas para reclamar un referéndum sobre un cambio político en la isla.

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