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La izquierda exige más control público del dinero que el Estado da a la Iglesia

El obispo de Bilbao promete no invertir más en títulos especulativos

El PSOE e Izquierda Unida dedicaron tres duras críticas a que la 'Iglesia especule en Bolsa', tras publicar ayer EL PAÍS que la Iglesia perdió 2,5 millones de euros en la Bolsa en los dos últimos ejercicios. La primera porque la Iglesia recibe dinero del Estado, no sólo de las aportaciones que hacen voluntariamente los contribuyentes en la declaración del impuesto sobre la renta, sino también a través de los colegios religiosos concertados y de las ONG católicas. La segunda porque ven 'incoherente e inconsistente' definirse como 'una institución sin fines de lucro y buscar el lucro de la especulación bursátil'. Y la tercero, porque 'éticamente' ven difícil 'que la Iglesia pida a los fieles colaboración para su obra social y después dedique esos fondos a la compra-venta de acciones'.

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El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, exige al Gobierno que fiscalice 'con rigor cada peseta de dinero público' que el Estado cede a la Iglesia 'en sus distintas facetas'. En su opinión, la Iglesia 'debe ser obligada a rendir exhaustivas cuentas de cómo gestiona el dinero de los contribuyentes', lo que ahora 'no hace'.

Llamazares advierte de que el dinero es un bien fungible y, como tal, puede ser fácil para la Iglesia decir que no es con dinero público con lo que especula en Bolsa. Otra clave reside, en su opinión, en valorar si esta institución necesita tanto dinero público si después 'le sobra' como para 'invertir en Bolsa o en paraísos fiscales o en activos que rozan la ilegalidad'.

Llamazares evita opinar sobre 'el mensaje ético' que la Iglesia traslada a sus fieles con actividades como ésta, 'que ya se vio en Gescartera y quedó aún más patente con las inversiones en paraísos fiscales en Jersey' con el BBVA, pero sí subraya la exigencia de que rindan cuenta del dinero que reciben de todos los españoles.

El diputado socialista Antonio Cuevas, portavoz de su grupo en la Comisión Gescartera, exige al Gobierno que 'reclame' a la Iglesia 'claridad en las cuentas' para explicar 'el destino' del dinero que recibe, 'y no sólo del IRPF' de las arcas públicas. 'No sé de dónde saca dinero para perder tanto', ironiza Cuevas para insinuar, como ya ocurrió en la investigación de Gescartera, que parte de ese dinero supuestamente de la Iglesia es propiedad, en realidad, de inversores que utilizan a la institución católica como testaferro.

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Como este extremo es imposible de demostrar, Cuevas exige al PP que 'investigue' si las subvenciones a la enseñanza y el porcentaje de impuestos para fines de interés social se dedican realmente a eso o 'acaban en Bolsa o en Jersey'. Este diputado considera que 'éticamente' va a ser 'cada vez más difícil' entender cómo la Iglesia católica 'compatibiliza' su mensaje de 'ofrecerse como entidad sin ánimo de lucro cuando bajo cuerda se dedica, como mínimo, a perder dinero en Bolsa'.

Disculpa a los feligreses

El obispado de Bilbao aprovechó este fin de semana su mejor medio de comunicación, la misa del domingo, para disculparse ante sus feligreses en una carta del obispo Ricardo Blázquez por haber destinado en el periodo 1998-2000 1,33 millones de euros a inversiones financieras, a través del BBV primero, y BBVA después, en Privanza Jersey. El obispado promete a sus fieles 'no invertir nunca en valores especulativos' y dice que la decisión 'no fue la más acertada'.

Si la pasada semana en un comunicado el obispado aseguraba que las inversiones se habían realizado 'por razón de mejor gestión administrativa', ante sus seguidores deja traslucir su voluntad de obtener mejores resultados, y que sus bienes están ahora íntegramente depositados en Vizcaya.

El obispado quiere recuperar 'la confianza' y por ello asegura que las inversiones no se han realizado ni con el dinero donado para misiones (Cáritas, Manos Unidas) ni de las colectas parroquiales, ni de la asignación tributaria.

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