La dirección de Cofrentes culpa de unos problemas que tuvo en su última parada a las Fallas y la Semana Santa
Los técnicos del Centro de Seguridad Nuclear (CSN) encontraron 12 'sucesos significativos' en las inspecciones realizadas a la central nuclear de Cofrentes (Valencia) en febrero y marzo de este año, durante su décimotercer proceso de parada para recargar el combustible y posterior puesta en marcha. 'No son fallos de ingeniería, sino aspectos humanos y organizativos', explicó un portavoz del CSN. Lo que este representante del consejo reconoce que es 'un poco chusco' es que entre las explicaciones dadas por los directivos de Cofrentes sobre la actitud de sus trabajadores estén 'los acontecimientos festivos simultáneos', como las Fallas y la Semana Santa. 'La seguridad tiene que funcionar en cualquier condición, incluso en días como la huelga general del 20 de junio', afirmó.
Otras de las excusas dadas fueron el esfuerzo de la recarga, que hubo que efectuar muchos trabajos de envergadura sin la planificación adecuada, un cambio organizativo, el elevado número de inspecciones de la CSN y la falta de atención. El portavoz del centro de seguridad reconoce que se trata de problemas debidos 'al exceso de confianza del personal en la técnica', que puede llevar a una relajación en los controles.
Los técnicos que revisaron la instalación destacaron 'la inadecuada planificación, precipitación o presión para el cumplimiento de los plazos previstos' en las operaciones de parada y recarga de combustible. Entre los fallos que hubo en febrero y marzo, se registró un 'número anormalmente alto de incidentes operativos', como cuatro paradas no programadas consecutivas durante el proceso de puesta en marcha de la central.
Los 12 sucesos fueron calificados de nivel 0 en la escala INES que mide la peligrosidad de los incidentes, lo que quiere decir que no tuvieron impacto directo en su seguridad, pero el CSN ha advertido a la central de que 'son un síntoma de la existencia de problemas que, de agravarse por no ser adecuadamente corregidos, podrían generar incidentes más significativos en el futuro, algo que no es aceptable', informa la agencia Europa Press.
Tras la recarga, el Ministerio de Economía ha autorizado, con el visto bueno del CSN, que la central aumente al 110% su potencia. Cofrentres empezó a funcionar en 1984, y 'no es la primera vez' que incrementa su producción, según el CSN. Como paso previo a esta mayor producción, el CSN pidió una serie de pruebas que deberían llevarse a cabo en verano, cuando las condiciones son más adversas. Uno de los principales problemas de seguridad de las centrales es que el proceso genera una gran cantidad de calor, por lo que el funcionamiento del sistema de refrigeración es fundamental.
