Abusos contra el Sexto Mandamiento
Hay más de 600 sacerdotes acusados de abusar de menores en Estados Unidos. Muchas de esas denuncias no se hubieran podido materializar de haber estado vigentes los cambios que esta semana tiene previsto aprobar la conferencia episcopal norteamericana. Éstos son los principales:
- Plazo máximo de denuncia. Las víctimas sólo tendrán un plazo de 10 años para denunciar los abusos, una vez que cumplan los 18 años. Es decir, 28 años como máximo, mientras que la política de tolerancia cero no imponía plazo de prescripción.
- Ajenos a las leyes civiles. Los obispos estadounidenses quedan exentos de tener que referir los casos a los tribunales civiles, a diferencia de la normativa que existe en la actualidad que les obligaba a hacerlo. Sólo deberán cumplir con las leyes civiles, que en la mitad de los Estados no les obliga a alertar a las autoridades.
- Juicios a puerta cerrada. Los pederastas serán juzgados en tribunales eclesiásticos regidos por el derecho canónico, no por las leyes civiles de EE UU. Los juicios se celebrarán a puerta cerrada y se mantendrá el anonimato de los acusados en el proceso. Algunos juicios podrían celebrarse en Roma, con lo cual estarían fuera del alcance de la justicia norteamericana, si esta decidiera solicitar las pruebas y testimonios para abrir procesos simultáneos.
- El Sexto Mandamiento. La deficion de 'abuso sexual' se restringe para 'evitar que alguien sea acusado por una mirada supuestamente lasciva'. La política de Dallas decía que el abuso 'no tenía que involucrar contacto físico, ni fuerza', pero, según la nueva normativa, debe 'contravenir de forma grave y objetiva el Sexto Mandamiento' ('No cometerás actos impuros').
