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Reportaje:CERCO A LAS TABACALERAS

El horror se anuncia en las cajetillas

Canadá y Brasil difunden en los paquetes de cigarrillos las advertencias de riesgo más extremas del mundo

Pablo Ximénez de Sandoval

A la vez que se intenta eliminar la publicidad del tabaco, otra medida clave para luchar contra el tabaquismo son las advertencias sanitarias en los paquetes de cigarrillos. Siguiendo una directiva europea, el 18 de octubre el Consejo de Ministros aprobaba un real decreto por el cual los fabricantes de cigarrillos están obligados a poner en las cajetillas el mensaje "Fumar mata". Un estudio sobre advertencias en los paquetes de cigarrillos publicado por la Sociedad Catalana para la Prevención del Tabaquismo concluye que, en efecto, "Fumar mata" es el mejor mensaje posible para concienciar a los fumadores. A partir del 1 de octubre de 2003 estas palabras ocuparán como mínimo el 30% del paquete de cigarrillos vendido en España. Pero el mensaje puede cambiarse por "Fumar puede matar" (que introduce el matiz de la posibilidad) o "Fumar perjudica gravemente su salud y la de los que están a su alrededor". En la otra cara de la cajetilla, el fabricante debe dedicar al menos el 40% de la superficie a mensajes que van desde "Fumar acorta la vida" hasta "Fumar provoca cáncer mortal de pulmón".

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Dolores Marín, jefa de la Unidad de Tabaquismo del Hospital Clínic de Barcelona y encargada del estudio comparativo, opina que la palabra puede "provoca escapismo". "Los fumadores quieren información clara. O mata o no mata. Pero si sólo puede matar, que los dejen en paz". Marín detalla en su estudio la efectividad de otros tipos de advertencias mucho más agresivas, como las de Brasil y Canadá.

Estos dos países han dado el paso de incluir imágenes en los paquetes para reforzar las advertencias, que buscan contrarrestar el glamour de la publicidad del tabaco. La clave está en la potencia visual de unos pulmones cancerosos o un bebé dormido junto a la leyenda "fumar puede dañar al bebé durante el embarazo". La idea tiene mucho que ver también con hacer invisible el tabaco. Son paquetes de cigarrillos que, sin duda, no se pueden dejar encima de la mesa sin provocar inquietud, cuando no pura náusea.

En Europa, el país que más lejos ha llegado por ahora en este aspecto es Holanda. Las cajetillas llevan mensajes como "Piense en lo que se ahorra si deja de fumar. Llame al...", e incluyen un número de teléfono de información. Otro mensaje dice "¿Quiere una piel joven? Llame al...". Son las advertencias gráficas, sin embargo, las que provocan mayor respuesta en el consumidor. La imagen de unos pulmones o un corazón negro fuerzan una toma de posición. "Estas son medidas que salen gratis, porque las pagan las compañías", explica Marín. "Por tanto, ¿a qué hay que esperar en Europa para ir más allá en las advertencias de las cajetillas?", plantea la experta.

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Sobre la firma

Pablo Ximénez de Sandoval
Es editorialista de la sección de Opinión. Trabaja en EL PAÍS desde el año 2000 y ha desarrollado su carrera en Nacional e Internacional. En 2014, inauguró la corresponsalía en Los Ángeles, California, que ocupó hasta diciembre de 2020. Es de Madrid y es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense.

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