_
_
_
_
LA POSGUERRA DE IRAK | El papel de la ONU

Powell defiende su propuesta

Estados Unidos espera tener aprobada su nueva resolución sobre Irak antes del discurso que el presidente, George W. Bush, pronunciará ante la Asamblea General de la ONU, el próximo 23 de septiembre. Pero las negociaciones, una vez más, se anuncian complicadas. Los miembros del Consejo de Seguridad acogieron con muchas reticencias el borrador que Washington hizo circular de manera informal. El texto propone crear una fuerza multinacional, bajo mando estadounidense, y pide establecer un calendario para celebrar elecciones en Irak y redactar una constitución.

"Queremos hacer esto lo más rápidamente posible", dijo ayer el jefe de la diplomacia estadounidense, Colin Powell. Respondiendo a las críticas expresadas por Francia y Alemania, Powell precisó que "la resolución está redactada para responder a las preocupaciones que líderes como el presidente Chirac y el canciller Schröder expresaron en el pasado. (...) Si tienen sugerencias, estaremos encantados de escucharlas".

Más información
Italia y España dan su apoyo a la propuesta de resolución sobre Irak de Estados Unidos

El secretario de Estado defendió su texto al indicar que no entendía muy bien los propósitos franco-alemanes. "No veo en su comunicado que hayan expresado claramente lo que buscan o a quien le traspasaríamos [el gobierno de Irak] si lo hiciéramos ahora mismo. Pensamos que la mejor manera de hacerlo era pedir a los iraquíes un plan para asegurar la transición".

Washington preferiría abreviar en lo posible las discusiones en la ONU para evitar que vuelvan a producirse los profundos enfrentamientos que dividieron al Consejo antes de la guerra. Su meta ideal sería conseguir una votación antes del 23 de septiembre, fecha en la que el presidente Bush abrirá la Asamblea General ante numerosos jefes de Estado, entre ellos el presidente español, José María Aznar. La primera ronda de consulta debería empezar hoy pero pocos en el órgano decisorio de la ONU pensaban que se podría cumplir el plazo fijado por EE UU.

Discretamente algunos de los quince miembros se hicieron eco de las críticas expresadas en Dresde por Chirac y Schröder. "Con este texto EE UU reduce su número de soldados y divide la factura pero a cambio no ofrece gran cosa", aseguró ayer un diplomático cercano a las negociaciones, "otorga más poder al Consejo de Gobierno iraquí pero el Consejo está en manos de los estadounidenses".

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

La resolución tiene como principal objetivo dar una cobertura legal a los países que se han negado a participar en la ocupación de Irak sin mandato de la ONU, como Turquía, India o Pakistán. "Tendrán de alguna forma que dar su visto bueno al texto, porque de lo contrario no servirá de nada", comentó una fuente diplomática.

El texto "autoriza la creación de una fuerza multinacional, bajo mando unificado (...) con vistas a contribuir al mantenimiento de la seguridad y estabilidad en Irak" y "urge a los Estados miembros a proporcionar fuerzas militares". La resolución no habla explícitamente de un mando estadounidense pero deja en manos de Washington "en nombre de los Estados participantes" informar al Consejo de Seguridad.

Sin especificar realmente el alcance de sus competencias, EE UU reafirma el "papel vital" de la ONU en Irak. La resolución pide al organismo que "reconozca" el Consejo de Gobierno iraquí como el "el principal órgano de la administración interina", un punto que será especialmente delicado puesto que el Consejo, bajo tutela estadounidense, no ha sido reconocido por ningún vecino de Irak.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_