Cuatro líneas, 50 kilómetros y 1.200 millones de euros
El alcalde de Sevilla, el socialista Alfredo Sánchez Monteseirín, ya advirtió ayer de que las obras que empiezan ahora no acabarán nunca. Según Monteseirín, la puesta en marcha de las máquinas que se emplearán para los primeros trabajos no debe considerarse un mero "momento simbólico". "No es una primera piedra", aseguró el alcalde, "sino el inicio de unas obras que no tendrán fin".
Además de los casi tres años que harán falta para rehabilitar los túneles ya construidos de la línea 1 y cavar el resto, las administraciones tienen ya diseñada una red de cuatro líneas que tardará unos 10 años en estar operativa, según aseguró en diciembre de 2001 el entonces presidente de la Sociedad Metro de Sevilla, Alejandro Rojas Marcos. Después, habrá que irle sumando prolongaciones y nuevos ramales en función de hacia dónde evolucione la ciudad.
El precio de la red básica del metro sevillano rondará los 1.200 millones. Aunque aún quedan sueltas muchas decisiones técnicas, entre las cuatro líneas recorrerán alrededor de 50 kilómetros.
Al margen de la primera línea, cuyo proyecto ya está adjudicado y se conoce al detalle, las otras tres tienen muchos aspectos por decidir, incluso su financiación. Porque aunque la intención inicial de la Junta es mantener la fórmula de concesión administrativa que se ha elegido para la línea 1, Izquierda Unida, socio de gobierno del PSOE en el Ayuntamiento de Sevilla, advierte de que peleará para que el resto del metro sea de construcción y explotación pública.
Por el momento, se sabe que la línea 2 será, en principio, la más cara. Costará alrededor de 288 millones. Los precios estimados para la tercera y la cuarta son 276 y 264 respectivamente.
