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CAMBIO POLÍTICO

El PSOE exige al Gobierno en funciones que le consulte todas las decisiones relevantes

Jesús Caldera, número dos del PSOE y futuro vicepresidente del Gobierno según todos los pronósticos, iniciará hoy las conversaciones con Javier Arenas, ministro de Presidencia en funciones, para ordenar el traspaso de poderes. Los socialistas quieren llegar a la investidura de José Luis Rodríguez Zapatero en menos de 40 días y reclaman al Gobierno en funciones que les consulten todas las decisiones relevantes que tomen hasta ese momento.

La primera decisión será el relevo de tropas en Irak, a mediados de abril. Caldera, al que Zapatero ha encargado la coordinación del traspaso de poderes, señaló ayer: "El relevo de las tropas lo deben consultar con nosotros. El modo de hacerlo, las condiciones en que se hagan, debe ser discutido y dialogado con quien debe formar Gobierno".

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Así se lo planteará hoy a Arenas y le expresará también que la renovación de dos magistrados del Tribunal Constitucional, que debe hacerse a partir del 8 de abril próximo, corresponde al nuevo Ejecutivo socialista y en ningún caso al Gobierno en funciones del PP: "Espero que no nombren a esos dos magistrados en un periodo en el que están en funciones".

El dirigente socialista recuerda que la Ley de Gobierno establece que los Ejecutivos en funciones sólo podrán resolver asuntos ordinarios. "Y éste no es un asunto ordinario o de trámite", señala. Por eso, los socialistas reclaman que el Gobierno en funciones le consulte la posición que España defenderá en foros internacionales que se reúnan en próximos días. "Y si surgen discrepancias entre su postura y la nuestra, deberán asumir la del PSOE, que representa hoy la voluntad mayoritaria de los españoles", señala Caldera. También pide que todo lo relacionado con las obras del trasvase del Ebro "debería quedar paralizado" a la espera de la decisión del nuevo Gobierno. Los Ejecutivos autónomos de Aragón y Cataluña han pedido ya al Ministerio de Medio Ambiente que se paralicen las expropiaciones en marcha para las obras del trasvase del Ebro.

El PSOE confía en que el periodo en que el PP siga gobernando en funciones sea lo más corto posible. Zapatero podría ser investido presidente del Gobierno en primera votación aunque carezca por sí mismo de los votos suficientes (tiene 164 escaños), los 176 necesarios. El futuro presidente cuenta de entrada con una acogida favorable o, al menos, no contraria, de los suficientes grupos de oposición como para que no tenga que someterse a una segunda vuelta en la que ya saldría elegido sin problema con sus propios votos. Lo cierto es que a Zapatero tampoco le parecería desdoro alguno que se diera esta segunda situación si en las conversaciones con los grupos parlamentarios, finalmente, le pidieran contrapartidas concretas para apoyar su investidura. El PSOE no está dispuesto a ofrecer contrapartidas a cambio del apoyo a la investidura de Zapatero, según las fuentes de su entorno consultadas.

Caldera, que se reunió ayer con todos los grupos parlamentarios, sacó una impresión favorable. El dirigente socialista ofreció, en nombre del futuro presidente del Gobierno, "diálogo, transparencia y flexibilidad" para atender las demandas de todos los grupos.

Caldera informó de los planes del nuevo Gobierno al portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida; al anterior portavoz del PNV en el Congreso, Iñaki Anasagasti; al dirigente de Coalición Canaria, Paulino Rivero; al coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares; al portavoz de la Chunta Aragonesista, José Antonio Labordeta, y a Francisco Rodríguez, del BNG. También ha conversado con los representantes de Esquerra Republicana de Catalunya y del grupo que se estrena en el Congreso, Nafarroa Bai.

Apoyo a la investidura

El sí rotundo a la investidura no lo ha dado nadie, pero si muestran cierta proclividad Coalición Canaria y CiU. Labordeta, en nombre de la Chunta Aragonesista, fue el más claro al señalar que la conversación de Caldera le induce a afirmar que votará afirmativamente a la investidura de Zapatero toda vez que el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, ha reafirmado su absoluto rechazo del Plan Hidrológico Nacional, que puso en marcha el Gobierno del PP y que Zapatero quiere enmendar totalmente. ERC, antes de que se celebraran las elecciones, se mostró dispuesta a apoyar un eventual Gobierno del PSOE. Pero pone como condición la aceptación de cuestiones programáticas, lo que choca con el modelo que quiere llevar adelante Zapatero, contrario a cualquier contrapartida. El líder socialista ofrece diálogo pero no va a atarse las manos con nada ni con nadie. IU no tiene objeciones para apoyar la investidura de Zapatero al estimar que ese apoyo no condicionará al grupo de Llamazares a criticar todo lo que haga falta si las políticas que lleva adelante el nuevo Gobierno no son de su agrado. Una posición similar manifiesta Coalición Canaria. Los socialistas, en la siguiente conversación, cuando se acerque la investidura, informarán a los grupos de la base del discurso de Zapatero para pedir el apoyo a su investidura.

Un soldado español patrulla junto a una mezquita en Diwaniya.
Un soldado español patrulla junto a una mezquita en Diwaniya.ASSOCIATED PRESS

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