_
_
_
_
_
Perfil | Mario Monti

'Super Mario' en Goldman

Mario Monti es una persona sosa, de las que sigue a raja tabla la partitura aun sabiendo que improvisando no se equivocará. Fue precisamente su aplicación estricta de la doctrina de la competencia la que le llevó hace cinco años a la fama y a ser considerado el enemigo número uno de los intereses de los grandes titanes de Wall Street. Hasta el punto que muchos llegaron a considerarle como la persona capaz de poner fin a la dominación estadounidense. Pero la vida da muchas vueltas. Monti, 62 años, ha fichado por Goldman Sachs, la primera firma de asesores en el campo de fusiones y adquisiciones.

Monti, formado en económicas por las universidades Bocconi y Yale, dejó la Comisión Europea en noviembre de 2004, después de estar al frente de la cartera de la competencia durante cinco años y de llevar la de Mercado Interior durante cuatro. Su mano dura en el examen de las megafusiones y de las posiciones de dominio de mercado caló tanto en EE UU que le llevó a ser conoció con el apodo de Super Mario, como el personaje de los videojuegos, o comparado con Harry Potter. Su reputación llevó a Silvio Berlusconi a pedirle que se sumara a su equipo de Gobierno, como ministro de Finanzas.

Más información
La UE alarga el plazo dado a Microsoft para que cumpla las sanciones
Microsoft publica documentos inéditos del proceso europeo por monopolio

Mario Monti jugó un papel instrumental en los casos de dominio de mercado de Microsoft o Coca-Cola, impuso duras condiciones a la fusión entre Time Warner y AOL e hizo descarrilar el plan de General Electric para comprar Honeywell. Aunque también hincó el diente a compañías europeas como France Télécom, Alstom, WestLB o Deutsche Post, el sector de la distribución de coches y las tiendas libres de impuestos de los aeropuertos.

En EE UU y en Europa se acusó a Monti, de aplicar con exceso la regulación al analizar las fusiones y los monopolios. Éste, frío como un reptil, miraba con exceso al daño que una operación de fusión o adquisición podía crear a los competidores, e intentó poner en práctica nuevas teorías que el Tribunal de Primera Instancia le ha desmontado.

Este italiano pasará a la historia como la persona que tumbó las barreras a la circulación de bienes y servicios entre los miembros de la UE. Y como comisario de la Competencia, logró dar una única voz a la política reguladora que se profesa desde Bruselas. Todo un logro si se tienen en cuenta las cacofonías que caracterizan otras áreas donde el margen de maniobra de la Comisión Europea es limitado y que tanto despistan fuera de la Unión. Monti dedicará una semana al mes a trabajar para el prestigioso banco de inversiones, al que aportará su visión sobre los retos económicos y sociales a los que deben hacer frente los países a escala global.

SCIAMMARELLA

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_