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Reportaje:

Batalla campal entre buscadores

Decenas de compañías intentan arrebatar a Google este negocio, el más rentable de Internet

Patricia Fernández de Lis

Multinacionales y empresas locales. Gobiernos, compañías de telecomunicaciones y gigantes de los contenidos. Históricos de Internet y recién llegados. Todos contra Google. Decenas de empresas como Microsoft, Yahoo, Siemens o TPI están tratando de encontrar la fórmula para arrebatarle a Google el trono de las búsquedas. La razón es que éste, el negocio más rentable de Internet, es, además, la puerta al resto de servicios. Y aunque Google no deja de aumentar su cuota de mercado, los analistas creen que estas iniciativas representan una amenaza real para su poder. Y no sólo ellas: un grupo de pequeñas e innovadoras compañías quieren convertirse en los nuevos googles.

Este mercado movió el año pasado 1.400 millones de euros sólo en Europa, un 65% más que en el año anterior
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Es el negocio más viejo de Internet y, por tanto, uno de los más consolidados. Pero es también el más disputado. Todas las empresas que aspiran a controlar la Red saben que primero deben hacerse con un pedazo del negocio de las búsquedas. Intentar localizar información es la actividad más popular entre los internautas, por encima de la consulta de correos electrónicos. Los usuarios utilizan los buscadores para encontrar páginas web, informarse antes de comprar un producto, buscar hoteles o guías de viaje, confirmar datos de los que no están seguros e, incluso, para buscar las páginas de los propios buscadores: según datos de Nielsen/NetRatings, la palabra google fue la segunda más tecleada en los buscadores el pasado noviembre.

Y es que, en estos momentos, el rey indiscutible de este negocio es Google. Su cuota ronda el 57% y, además, no para de crecer: hace dos años tenía sólo el 28% del mercado, según datos de los analistas bursátiles de WR Hambrecht. De hecho, su página web ha sido la segunda del mundo que más creció en visitas el año pasado (un 29%, según Nielsen/NetRatings), sólo detrás de la de Apple. Nadie discute el liderazgo de Google. Excepto toda su competencia.

¿Por qué todos quieren tener un buscador? "Es el activo más crítico de Internet", explica Hellen Omwando, analista de la consultora Forrester. "Es una herramienta poderosísima, especialmente desde el punto de vista del marketing, ya que puedes segmentar perfectamente tu audiencia". La publicidad en buscadores es, efectivamente, muy poderosa: si un internauta teclea "Madrid" en un buscador porque quiere viajar a esta ciudad, una agencia puede ofrecerle directamente un viaje a Madrid, ganando ambos con la transacción. Los anunciantes aprecian la relación calidad/precio. Según Forrester, conseguir un cliente en un buscador cuesta entre 7 y 10 dólares. Hacerlo por las páginas amarillas supone entre 15 y 25 dólares, mientras que por correo ordinario la tarifa puede subir hasta los 60 u 80. Así, y según datos de la patronal de publicidad en Internet IAB, el 40% de los anuncios publicados en la Red durante el segundo semestre de 2005 estaban localizados en buscadores, muy por encima de cualquier otro medio.

Éste es, por tanto, un negocio muy jugoso. El mercado de los buscadores movió el pasado año 1.400 millones de euros sólo en Europa, un 65% más que en 2004. Y las previsiones indican que esta cifra crecerá hasta los 3.000 millones en 2010, según Forrester.Es, además, un negocio extremadamente rentable. Las cifras de Google dan cuenta de ello. Los beneficios de la compañía rozaron en el último trimestre los 400 millones de dólares de unas ventas de 1.578 (24%).

Y el buscador es, por último, la puerta a todo un mundo. La importancia de este negocio es tal que algunos analistas, como los de Stifel Nicolaus, consideran Google mucho más que un buscador: es un "mecanismo de distribución para el comercio online", ya que, a través de sus páginas, los usuarios llegan a otras donde compran y venden, o al menos toman decisiones de compraventa. Y según aumenta el contenido que está a disposición de los internautas, aumenta también la necesidad de disponer de buenas herramientas para buscar. "Creemos que las oportunidades de búsqueda irán más allá de Internet y llegarán a la televisión, la telefonía móvil y otras plataformas", explican los analistas de WR Hambrecht en un extenso informe.

Éstas son algunas de las razones que están empujando a compañías como Yahoo!, Microsoft, Thomson, France Télécom, Deutsche Telekom, Siemens, Bertelsmann o TPI a intentar plantarle cara a Google. ¿Quién es quién en esta pelea?

- Yahoo! El eterno rival. Es la primera compañía que lanzó un directorio para ordenar páginas web. Es, por tanto, la que más tiempo lleva en este negocio y, aunque se mantiene en un discreto segundo lugar, tiene la "capacidad e inteligencia", explica Omwando, para superar a Google. Yahoo! está mejorando su buscador comprando compañías como Flickr (un sitio web para compartir fotografías) e introduciendo novedades como, por ejemplo, Yahoo! answers, donde personas "de verdad" contestan a preguntas complejas. En todo caso, hace unos días la compañía se vio obligada a desmentir una información de Bloomberg donde su directora financiera, Susan Decker, aseguraba: "No creemos que sea razonable asumir que vamos a ganar mucha cuota de mercado a Google".

- Microsoft. La estrategia de la compañía de Seattle tiene dos patas. Una se basa en su portal MSN. Como en el caso de Yahoo!, Microsoft intenta explotar sus fortalezas (la mayor, su negocio de mensajería instantánea Messenger) y mejorar su buscador. Pero, además, Microsoft cuenta con una poderosísima arma: su sistema operativo Windows, instalado en el 90% de los ordenadores. Su próxima versión, Vista, se lanzará este año, y cuando los usuarios compren el producto se encontrarán con el buscador MSN de serie. "El negocio de Google se va a resentir", opina Jaime García Cantero, analista de IDC. "Microsoft va a hacer todo lo posible por hacerse con ese negocio".

- Quaero. La noticia ha dado la vuelta al mundo: Jacques Chirac y Gerhard Schröder impulsaron esta iniciativa germano-francesa para acabar con el dominio estadounidense en el negocio de las búsquedas, y lo que eso supone desde el punto de vista cultural, ya que el primer filtro de entrada en la Red de los internautas está controlado por una compañía estadounidense. Poco más se sabe de Quaero, en todo caso. Están implicadas France Télécom, Deutsche Telekom, Bertelsmann, Thomson y Siemens (su presidente, Heinrich von Pierer, está jugando un papel muy destacado, según Financial Times). La Agencia para la Innovación Industrial será la encargada de resolver tecnológicamente el proyecto, que, según las primeras informaciones, influirá especialmente en la búsqueda de información multimedia.

- Noxtrum. TPI lanzó su buscador en pruebas la pasada semana. Su idea es ofrecer mayor variedad de fórmulas publicitarias y, sobre todo, aprovechar los datos de las páginas amarillas y las blancas para competir con el gigante estadounidense. Hacerlo será complicado, en todo caso, porque Google ya está desarrollando negocios de búsquedas locales. "Una cosa es tener los datos de las páginas amarillas, y otra distinta es convertirte en un buscador relevante", advierte Omwando.

-Otras iniciativas. En el mercado hay decenas de buscadores que mantienen discretas cuotas de mercado. La más importante es AOL, con un 7% del negocio estadounidense. Compiten también compañías más pequeñas, cada una de ellas con una característica concreta por la que intentan desmarcarse de los gigantes del negocio: MyWay no incluye anuncios de publicidad; Dogpile busca resultados entre todos sus competidores; AskJeeves promete mejores resultados gracias a una tecnología que organiza las páginas buscando entre las que pertenecen a su mismo ámbito de referencia. ¿Puede alguno de estos competidores arrebatarle el trono a Google? Los analistas creen que será complicado, dada la fuerza de su nombre y su tecnología. "La potencia de este buscador, en tiempo de respuesta y fiabilidad, es impresionante", opina García Cantero. Pero también piensan que es probable que algunas de estas iniciativas mejoren algún día la oferta de Google, tal y como Google mejoró en su momento cualquier otra. "El secreto de Google es que ayuda a sus usuarios a encontrar lo que buscan. Punto. Es así de simple. Cualquiera que intente arrebatarle el negocio tendrá que empezar por ahí", concluye Omwando

Javier Aguilera (TPI), Terry Semel (Yahoo!), Heinrich Von Pierer (Siemens) y Bill Gates (Microsoft)
Javier Aguilera (TPI), Terry Semel (Yahoo!), Heinrich Von Pierer (Siemens) y Bill Gates (Microsoft)

No hagas el mal... excepto en China

Google no es el primer buscador que acepta desembarcar en el jugoso mercado chino a cambio de censurar el acceso de los internautas a los resultados de sus búsquedas. Antes que ella, Yahoo y MSN (el portal de Microsoft) habían aceptado las exigencias de Pekín, que incluyen la prohibición de centenares de términos, entre ellos "derechos humanos", "libertad", "democracia", [la secta] Falun Gong, Tíbet o Taiwan. Y es que las multinacionales saben que sólo es cuestión de tiempo que el mercado chino de Internet, en estos momentos el segundo del mundo con 100 millones de usuarios, sobrepase al estadounidense para convertirse en el primero.

Microsoft y Yahoo ya han sido criticadas por colaborar con la censura china. Pero la decisión de Google, además, ha decepcionado a muchos analistas y bloggers [creadores de páginas personales en Internet]. Probablemente, gran parte de la culpa es de la propia Google, que fue quien decidió incluir la declaración de intenciones "no seas malvado" (don't be evil) en su folleto de salida a Bolsa. Además, hace tan sólo unos días, la compañía se negaba a proporcionar datos de las búsquedas de sus usuarios al Gobierno de Estados Unidos. "Nuevo lema: no seas hipócrita", sugiere el blogger Jos Birken desde Singapur.

El fundador de Google, Sergey Brin, ha explicado que, para él, "más información es mejor". La esperanza de los chinos ahora es que -tal y como expresaba el editorial de Financial Times del jueves- el poder de la red es tal que "encontrarán lo que sea que el Gobierno chino, con la complicidad de las compañías occidentales de Internet, está intentando ocultar".

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Sobre la firma

Patricia Fernández de Lis
Es redactora jefa de 'Materia', la sección de Ciencia de EL PAÍS, de Tecnología y de Salud. Trabajó diez años como redactora de economía y tecnología en EL PAÍS antes de fundar el diario 'Público' y, en 2012, creó la web de noticias de ciencia 'Materia'. Los fines de semana colabora con RNE y escribe, cuando puede, de ciencia y tecnología.

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