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El EGM expedienta a la Cope y plantea su expulsión por manipular datos de audiencia

Las agencias de medios dicen que la cadena ha lanzado "un ataque frontal" al sistema

Rosario G. Gómez

La Asociación para la Investigación de los Medios de Comunicación (AIMC), empresa encargada de realizar el Estudio General de Medios (EGM), decidió ayer por unanimidad de su junta directiva incoar un expediente sancionador a la Cope. Esta iniciativa va acompañada de una propuesta de expulsión por "faltas muy graves". El representante de aquella cadena en la junta directiva presentó el pasado jueves su dimisión.

Las acciones de la AIMC son una respuesta a la trama montada por la cadena propiedad de la Conferencia Episcopal para manipular los datos del EGM, un organismo avalado tanto por los operadores como por los anunciantes. La Cope infiltró falsos entrevistadores en el equipo que realiza el trabajo de campo para rellenar los cuestionarios. Estos encuestadores, comandados por el jefe de deportes de la cadena, José Antonio Abellán, intentaban demostrar "el fraude" en el EGM. Actuaron en 19 ciudades.

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La AIMC ha abierto un plazo de 15 días para que la Cope pueda presentar las alegaciones que considere oportunas. Concluido este tiempo, la entidad que agrupa a más de 160 socios (medios de comunicación, anunciantes, agencias de publicidad), tomará una decisión final sobre el expediente de expulsión. Como medida cautelar y "ante la gravedad de los hechos", la AIMC ha decidido "omitir temporalmente" los datos de audiencia correspondientes a la Cope y a Cadena 100, la emisora musical de los obispos. Según el calendario previsto, el EGM debía ofrecer los resultados de la primera oleada del año en próximo 18 de abril. El estudio ofrece una radiografía de los oyentes y aporta datos sobre consumo y hábitos de vida. También facilita datos sobre los lectores de los periódicos o las personas que acceden a los medios digitales.

"Atentado"

Todos los sectores representados en la entidad han expresado su respaldo a la AIMC. La Asociación de Agencias de Medios (AM) condenó ayer "la manera en la que se ha atentado contra el EGM". En su opinión, se trata de "un ataque frontal al sistema de investigación y metodología diseñada por el propio mercado y en el que participa toda la industria publicitaria".

"No entendemos que nadie encuentre beneficio en la manipulación de un estudio que a todos nos provee de información de contrastada validez para nuestro desarrollo profesional", agrega la AM. Los datos del EGM son el instrumento que utilizan las agencias y los anunciantes para planificar las campañas publicitarias.

La Asociación Catalana de Radio, entidad que integra el conjunto de emisoras privadas comerciales que operan en Cataluña, así como el grupo de emisoras públicas de Catalunya Ràdio, hicieron ayer pública su "profunda" preocupación ante la trama promovida por la Cope e instaron a la AIMC a "depurar todas las responsabilidades con las consecuencias de todo orden que puedan derivarse".

La AIMC justifica la apertura del expediente contra la Cope en las "irregularidades constadas en sus controles de las entrevistas de campo por parte de determinados entrevistadores e inducidos por la propia cadena".

Una de las personas encuestados para esta oleada del EGM relató ayer que el pasado febrero recibió la visita de dos encuestadores. "Me pareció raro porque venían dos. Uno portaba un ordenador en el que supuestamente debía incorporar las respuestas al cuestionario, pero ni lo utilizó. El otro tomó notas en un papel y sólo me preguntó cuatro cosas sobre radio", cuenta Ricardo Hausdorff, director de una empresa de estudios de mercado. Asegura que pocos días después recibió la visita de una supervisora de Random, uno de los tres institutos que colaboran con el EGM para elaborar el trabajo de campo.

"Querían comprobar que se había hecho la encuesta y la calidad de los datos", afirma Hausdorff. Tras este incidente, Random anuló su encuesta. "Random hizo bien su trabajo. Yo ya les había advertido a los entrevistadores de que al pertenecer a una empresa de investigación de mercado no debía ser entrevistado. Pero ellos ignoraron esta circunstancia e insistieron en hacer la encuesta", concluye.

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