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La investigación del 11-M

De la Vega tacha de irresponsable al PP por dudar de la investigación

Lourdes Lucio

La teoría conspirativa sobre la autoría de los atentados del 11-M a la que se ha apuntado la dirección del PP merece todo el reproche del Gobierno, según puso ayer de manifiesto la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, en la clausura de la sexta Convención Municipal del PSOE.

De la Vega consideró una "irresponsabilidad" el que el principal partido de la oposición lance "sombras de sospechas" sobre la investigación judicial de los atentados, en la que se adjudica a los terroristas islamistas la colocación de las bombas que mataron a 191 personas.

La vicepresidenta primera destacó que dos años después de perder las elecciones legislativas, a la derecha "le cuesta asumir" que los ciudadanos le retiraron su confianza. "Les cuesta tanto que, incluso, lanzan sombras de sospecha sobre el funcionamiento del poder judicial y de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado en la investigación sobre el terrible atentado. ¡Qué irresponsabilidad!", exclamó.

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Frente a esta actitud, Fernández de la Vega reiteró el "apoyo" y el "reconocimiento" del Gobierno a todos los que intervienen en el trabajo judicial y policial "y en la depuración de responsabilidades por el atentado".

Balance de legislatura

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En la clausura de la Convención Municipal del PSOE, a la que han asistido 1.700 personas, la vicepresidenta primera dijo que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero puede hacer "un buen balance" de los dos años de legislatura, pese "al ruido", las "mentiras" y la "descalificación" del PP. Destacó sobre todo la "modernización" promovida en el terreno social y territorial, una reforma que consideró necesaria. "Si por ellos hubiera sido, no existiría la España autonómica y plural", dijo.

Frente al mensaje que transmite el PP de que España se rompe, De la Vega aseveró que "la realidad" es que España tiene una "salud estupenda" y es ya la octava potencia mundial.

En esta línea abundó el presidente andaluz y del PSOE, Manuel Chaves, para quien la "estrategia de soflama" del PP está escurriendo a esta organización "por la pendiente propia de un partido antisistema". A su juicio, "si ETA pone una bomba, [los populares] no miran a ETA para condenarla, sino al Gobierno democrático de España". Chaves cree que el PP se ha convertido en el partido "del no" y tan sólo se ha limitado a "envolverse en la bandera española sin presentar ni una sola alternativa". El presidente andaluz advirtió del "contagio" de esta actitud en el presidente de la patronal, José María Cuevas, al que recomendó "no hacer siempre caso al PP".

Quizás impactado por las declaraciones de Pilar Manjón, quien expresó con amargura su temor de que las víctimas del 11-M acaben "como los de la colza", Chaves aseguró que la obligación política de los socialistas es que los afectados por los atentados "no caigan en el olvido".

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