Los socios del EGM respaldan que se expulse a la Cope
La AIMC detalla las "manipulaciones" de Abellán para alterar las audiencias
La asamblea general de la Asociación para la Investigación de los Medios de Comunicación (AIMC) respaldó ayer la expulsión de la Cope del Estudio General de Medios (EGM) y la aplicación de sanciones a la cadena de la Conferencia Episcopal. Los directivos de la entidad detallaron la trama puesta en marcha por el jefe de deportes de la Cope, José Antonio Abellán, cuyos programas habían experimentado espectaculares subidas de audiencia.
Sobornaron a los entrevistadores, cambiaron las rutas y forzaron respuestas
La propuesta de expulsión fue adoptada el pasado viernes por la junta directiva de la entidad que preside Carlos Lozano y que agrupa a 160 empresas (medios de comunicación, anunciantes, centrales de medios, agencias de publicidad y consultores). La AIMC abrió un periodo de 15 días para que la Cope pudiera presentar las alegaciones que considere oportunas.
Durante la celebración de la asamblea general, los responsables de la AIMC hicieron una detallada exposición de la operación diseñada por José Antonio Abellán para manipular los datos del EGM. Según las investigaciones llevadas a cabo por la entidad, en torno a un 2% de los cuestionarios han sido eliminados, por considerar que estaban contaminados por la red de falsos entrevistadores del comando Abellán. La AIMC definió así al equipo de encuestadores infiltrados por el periodista de la Cope. Abellán ha mantenido que su objetivo era demostrar que el EGM es vulnerable, y las encuestas, manipulables.
Para los directivos de la AIMC, los autores de la trama diseñada para alterar los resultados han sido "mentirosos, tramposos e ignorantes". Además de infiltrarse (desde el mes de septiembre pasado) en la red de encuestadores, sobornaron a otros entrevistadores para manipular las encuestas, cambiaron las rutas, forzaron respuestas de los entrevistados, incluyeron respuestas sobre los programas que decían escuchar y borraron otras sobre las preferencias declaradas por los encuestados, según fuentes de la AIMC. Falseaban los teléfonos de los encuestados, no mostraban los logotipos de las empresas sobre las que preguntaban y tampoco formulaban otras cuestiones sobre hábitos de consumo y estilo de vida.
La AIMC detectó que los programas de radio que lidera Abellán (El tirachinas, La jungla, Rock & gol, que se emiten en la Cope y en Cadena 100) habían experimentado sospechosas subidas de audiencia. Además, estas encuestas estaban cumplimentadas de manera minuciosa. También descubrieron que los entrevistadores falsos estuvieron actuando hasta dos días antes de que la AIMC destapara públicamente la trama. Las irregularidades en la recogida de datos fueron detectadas en los informes de supervisión que se realizaron el pasado mes de enero.
La entidad que realiza el EGM, junto a los institutos demoscópicos encargados del trabajo de campo, reiteraron ayer su intención de estudiar acciones legales contra la Cope. Los miembros de la asamblea general defendieron la profesionalidad de las empresas encargadas de la recogida de datos: Synovarte, TNS y Random, de prestigio internacional.
No obstante, el organismo demoscópico pospuso ayer la decisión de hacer públicos los datos de la primera oleada del año, prevista para el próximo 18 de abril, para una junta extraordinaria, cuya fecha de celebración no ha sido concretada. Los institutos demoscópicos han anunciado su intención de continuar las investigaciones para depurar los datos y hacer un riguroso seguimiento del control de calidad, tanto de las entrevistas telefónicas como de las personales.
La AIMC puso en conocimiento de la Cope el resultado de sus investigaciones el pasado día 8. Pocas horas después, el organismo elaboró una nota en la que denunciaba falsificaciones dirigidas a "alterar fraudulentamente los datos de audiencia". Esta acción fue calificada de "ataque frontal" al sistema diseñado por el mercado para proveerse de información de audiencia sobre los medios de comunicación, especialmente en el sector de la radio y la prensa. Tanto la asociación de radio privada como las organizaciones de anunciantes y agencias de medios han condenado la actuación de la Cope.
