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Un mes después del atentado

AENA señala que la bomba no ha afectado al ritmo de la terminal

La explosión de la bomba que la banda terrorista ETA colocó en la Terminal 4 de Barajas hace un mes no ha afectado a la actividad del edificio más moderno del aeropuerto de Madrid. Desde AENA (el organismo que gestiona los aeropuertos españoles) y la Federación Española de Asociaciones de Agencias de Viajes (Feaav) destacan que la explosión del pasado 30 de diciembre no ha tenido "efectos significativos" en los vuelos ni ha provocado temor entre los usuarios.

A falta de datos oficiales de la actividad registrada este mes, un portavoz de AENA aseguró a Servimedia que los pasajeros acuden a la T-4 igual que antes del atentado.

Esa percepción se repite entre los responsables del mercado turístico. "No nos han comunicado ni una sola cancelación de viajes o vuelos por el atentado, ni de viajeros españoles ni de extranjeros", indicó ayer por teléfono Jesús Martínez Millán, presidente de la Feaav.

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La federación aglutina a 2.000 agencias de viajes, responsables del 60% del mercado doméstico. "Los españoles entienden que un atentado es algo excepcional y que existe una posibilidad muy remota de resultar afectado por un acto terrorista", añadió Martínez Millán.

Menos efectos que el 11-M

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"Después del 11-M [el atentado terrorista del 11 de marzo de 2004 que causó 200 víctimas en Madrid] se notó una caída en la ocupación hotelera", recuerda el presidente de la Feaav. "Pero el mercado se recuperó en dos días y en esta ocasión, ni siquiera se ha resentido", añadió.

Para Iberia, la aerolínea que opera con más vuelos en la T-4, los atentados de marzo no supusieron "ninguna repercusión" en el turismo, según una portavoz de la compañía.

Iberia aún no dispone de los datos de tráfico aéreo de enero, que harán públicos el próximo 13 de febrero. A falta de ese medidor, la compañía aérea recibió un número "insignificante" de demandas, tras ofrecer a los pasajeros con vuelos entre el 30 de diciembre y el 1 de enero la posibilidad de reembolsar sus billetes o de cambiarlos por viajes en fechas diferentes.

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