Jacinto Luis Guereña, poeta, ensayista y traductor
El escritor Jacinto Luis Guereña Seggiaro (Cañada de Gómez, Argentina, 1915) falleció en Madrid el pasado 11 de febrero.
El poeta, escritor, ensayista y traductor Jacinto Luis Guereña ha muerto en Madrid el 11 de febrero. Nació en Argentina en 1915, hijo de padre vasco y madre italiana. Su familia pasó un tiempo en Marruecos antes de trasladarse a vivir en Madrid en 1931. Guereña estudió Magisterio con Rodolfo Llopis ganando las oposiciones a maestro en 1936.
Durante la Guerra Civil estuvo en varios frentes siendo miliciano de la cultura. Fue uno de los oficiales formados en la Escuela de Guerra, una institución creada para formar mandos del Ejército republicano y en la batalla del Ebro combatió como oficial de ingenieros de transmisiones. Para él la batalla del Ebro fue un hecho cumbre en su vida, en el que su vida individual se mezcló con la de sus camaradas y con el destino del país forjando un momento supremo de la historia. Fue el momento, según confesaba, en el que no le hubiera importado morir. A la caída de Cataluña cruzó la frontera de Francia el 9 de febrero junto al grueso del derrotado Ejército republicano.
Su paso por varios campos de refugiados, especialmente Argeles, le evocaban imágenes dantescas. Siempre contempló con gran dolor el desastre que supuso la Guerra Civil para el país y sobre todo para su generación, sin duda la más preparada intelectualmente que había existido en España.
Durante el largo exilio en Francia, donde se casó con una maestra francesa, se dedicó a la docencia y a realizar una importante obra poética bilingüe. Publicó varios libros de poemas en francés siendo uno de los poetas seleccionados para formar parte de la Histoire de la poésie française, de Robert Sabatier (1982).
En 1945 fundó la revista literaria Meduse. Hizo también una considerable labor para dar a conocer la poesía moderna española en Francia editando, entre otros trabajos, dos antologías en francés de poesía española. Dedicó varios libros y artículos a Miguel Hernández, poeta por el que sentía una profunda admiración.
Después de la muerte de Franco publicó en varios periódicos españoles, dio conferencias y participó en simposios.
Comenzó su principal obra poética en castellano con Poema del dolor y de la sonrisa de España (1945). La poesía de Guereña es intimista, de sensaciones expresadas en imágenes que se concatenan dando forma a un diario poético, diario que escribió hasta casi sus últimos momentos. Es una poesía que recoge la tradición de la mejor poesía del 27 pero que a la vez tiene una veta de los clásicos conceptistas españoles, lo que le da un carácter muy personal e intemporal.
Fue un poeta de espíritu furiosamente independiente que vivió intensamente su poesía, tan intensamente que en las últimas décadas se mantuvo alejado de todos los honores y de los circuitos literarios que le podían haber ayudado a divulgar más su obra. Con Guereña se va un hombre de la República que perdió la guerra en la batalla del Ebro, en cuyo campo de batalla es donde ha querido que sean esparcidas sus cenizas.
Enrique Montero es historiador.
