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Reportaje:Mis Primeros Clásicos

Amigo Viernes

EL PAÍS presenta mañana la adaptación para niños del clásico 'Robinson Crusoe', de Daniel Defoe, por 2,95 euros

Andrea Aguilar

Él soñaba con embarcarse y viajar. Tras su primera travesía, nada logró hacerle cambiar de parecer. Ni piratas, ni tormentas, ni la oposición paterna. Así que no es de extrañar que el decidido Robinson Crusoe supiera hacer frente a cuantos infortunios se cruzaron en su camino. Su historia la escribió Daniel Defoe en 1719, como si del mismo Robinson se tratara. Una falsa autobiografía, por tanto, que pasa por ser la primera novela en lengua inglesa.

Su verdadero autor hizo de la polémica su profesión. Fue un insigne panfletista y fundó una de las primeras revistas políticas de la historia. Una vida tan agitada como la suya no le sirvió, sin embargo, de fuente de inspiración para escribir acerca de Crusoe, el primer náufrago organizado. Detrás de su aventura de ficción se encuentran las historias de supervivencia de dos marineros: uno escocés, Alexander Selkirk -rescatado en 1709 tras pasar cuatro años en una isla-, y otro español, Pedro Serrano -que en 1534 salió de su aislamiento caribeño después de ocho años-.

Crusoe, como ellos, fue el único superviviente del barco en el que viajaba cuando éste encalló en un banco de arena. Nadó hasta la playa más cercana y allí fundó su hogar. Durante años, fue el único habitante de la isla. Construyó su casa, sembró su cosecha y ordenó su vida en plena naturaleza. Cuando unos salvajes desembarcaron en la tranquila isla dispuestos a sacrificar a un hombre, Robinson les ahuyentó y consiguió salvarle. A partir de entonces, fueron dos en la isla: Crusoe y su amigo y fiel sirviente, a quien bautizó Viernes.

En los 28 años que el famoso náufrago pasó en la isla, se mantuvo bastante ocupado. Participó en portentosas hazañas, como la liberación del padre de Viernes y de un marinero español, que también iban a ser sacrificados. Robinson, además, prestó ayuda a un capitán inglés cuya tripulación se había amotinado y fue así como logró salir de la isla y emprender el camino de vuelta a Inglaterra junto a su amigo Viernes.

Las traducciones, reimpresiones y adaptaciones pronto formaron parte de la historia del mítico Robinson Crusoe. Su solitaria aventura ha fascinado a millones de lectores. James Joyce e Italo Calvino se cuentan entre los más ilustres. Buñuel hizo una película en Hollywood sobre su portentosa supervivencia y el premio Nobel J. M. Coetzee dio su versión de esta historia en Foe. Así que el clásico sigue vivo y sus seguidores siguen preguntándose si un hombre solo sería capaz de empezar de cero.

Nuria Ochoa ha realizado la adaptación para la colección Mis Primeros Clásicos, con dibujos de Cristina Picazo.

en <i>Robinson Crusoe,</i> de la colección Mis Primeros Clásicos.
en Robinson Crusoe, de la colección Mis Primeros Clásicos.
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Sobre la firma

Andrea Aguilar
Es periodista cultural. Licenciada en Historia y Políticas por la Universidad de Kent, fue becada por el Graduate School of Journalism de la Universidad de Columbia en Nueva York. Su trabajo, con un foco especial en el mundo literario, también ha aparecido en revistas como The Paris Review o The Reading Room Journal.

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