Los partidos pactan regular por ley la labor del gabinete de encuestas del 'lehendakari'

El Parlamento le endosó ayer al Ejecutivo el encargo de regular por ley el Gabinete de Prospecciones Sociológicas, el controvertido centro de sondeos adscrito a la Lehendakaritza, cuya independencia y neutralidad ha sido puesta en entredicho por los partidos de la oposición. El Gobierno deberá presentar el proyecto de ley antes de fin de año y, aunque el PSE planteaba en la iniciativa original que fuera el Parlamento quien eligiese al responsable de este órgano, será finalmente el Ejecutivo quien lo haga. A cambio, la Cámara tendrá prioridad a la hora de recibir sus informes y estudios.

El acuerdo, al que se incorporaron también los partidos que apoyan al Gobierno (PNV, EA y EB) consta de tres puntos en los que se recogen las demandas del partido proponente, el PSE, y de los enmendantes, el tripartito y el PP. El texto final establece que el proyecto de ley que ordene el funcionamiento del Gabinete incorporará principios que garanticen la independencia profesional, la objetividad, la neutralidad, el respeto a los derechos de la ciudadanía y el respeto al secreto estadístico y a la legislación de Protección de Datos.

El Parlamento reclama además al Ejecutivo que le otorgue la prioridad a la hora de recibir los trabajos y los informes sociológicos realizados. También le pide que la nueva normativa regule el acceso a las bases de datos del centro por parte de investigadores o ciudadanos interesados en cualquiera de los informes emitidos o las publicaciones elaboradas. El responsable del centro seguirá siendo nombrado por el Gobierno, "dando cuenta de ese nombramiento al Parlamento vasco".

El Gabinete de Prospecciones Sociológicas, adscrito a la Presidencia del Gobierno, tenía como objeto en su origen servir de asesoramiento a los sucesivos lehendakaris para conocer las demandas y las inquietudes de la sociedad vasca respecto de aquellos problemas que les afectan.

Los partidos de la oposición han criticado, sobre todo en los últimos seis años, que el Gabinete de Prospecciones Sociológicas ha estado más volcado en ratificar, con el enfoque y los resultados de sus encuestas, las políticas del Gobierno y más en concreto las políticas y planes del propio lehendakari. Además de los denominados Sociómetros, estudios estacionales en los que se pregunta a la sociedad sobre determinados aspectos, políticos y sociales, el Gabinete ha hecho un seguimiento especial del plan Ibarretxe y de los planteamientos del lehendakari sobre el "derecho a decidir".

Al final, todos los partidos se congratularon de haber consensuado una iniciativa para regular por ley la entidad, ya que creen que es la mejor para garantizar su independencia y neutralidad frente al partido o partidos que estén al frente del Ejecutivo.

El decreto del CIS

El portavoz de EA, Juan Porres, quiso dejar claro, no obstante, que, a pesar de que va a ser la regulación más garantista del Estado -el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) está regulado por decreto- "la fórmula jurídica no va a ser la que garantice la imparcialidad del centro".

Aunque la propuesta estaba transaccionada entre todos los partidos, el debate entre el PNV y el PSE se caldeó. Después de unas intervenciones en las que, premeditadamente, evitaron el enfrentamiento, la portavoz del PNV, Elixabete Piñol, criticó la "tendenciosidad" del CIS, y "su falta de independencia, que ha sido denunciada no solo por los partidos, sino también por los trabajadores". La parlamentaria del PNV puso como ejemplo contrario "la eficacia" del Gabinete de Prospecciones Sociológicas, la "total independencia" y los "criterios totalmente científicos" que utilizan sus profesionales.

El socialista Antonio Rivera, quien en la primera intervención fue muy correcto, en la réplica dejó claro que "el silencio a algunas críticas del PNV es pura cortesía, no ignorancia". Tras reprochar que el "autobombo" sobra, atribuyó los excesos de la portavoz peneuvista a que "trae los discursos escritos y luego no puede cambiar". "Le ha debido de dar el viento sur, señor Rivera", respondió Piñol, recordando que el viento sur era "un atenuante en el antiguo Código Penal".

El portavoz del PP, Leopoldo Barreda, mostró sus dudas de que el Gobierno vaya a cumplir el encargo, mientras que la de Aralar, Aintzane Ezenarro, se congratuló de haber conseguido mover de sus posiciones a los partidos del Gobierno. El representante de EB, Oskar Matute, argumentó que de la eficacia del Gabinete da fe el uso que hacen los periódicos de sus estudios, pero reconoció que "es posible que esta iniciativa lo mejore". EHAK no participó en el debate.