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Getxo crea un consejo urbanístico abierto a los vecinos para el proyecto de 8.300 viviendas

El Ayuntamiento de Getxo creará el próximo 23 de febrero un consejo asesor urbanístico abierto a los vecinos, una figura que por vez primera permite participar a los ciudadanos en el urbanismo del municipio. El órgano abordará el Plan Territorial Parcial de Getxo, en el que se incluye el polémico proyecto del barrio Andra Mari, una zona de 250 hectáreas donde se plantea construir 8.368 viviendas. Es la mayor operación urbanística de Vizcaya en los últimos años, pero ha provocado la contestación de vecinos y partidos de la oposición.

La constitución del consejo asesor, que será aprobada en el pleno municipal del 23 de febrero, fue anunciada ayer en Getxo por el consejero de Vivienda, Javier Madrazo. Un concejal de EB lleva el área de Planeamiento Urbanístico en dicho municipio, en el que el PNV tiene la mayoría. Tras la reacción social en contra del proyecto, Vivienda ha salido públicamente ya dos veces en apenas dos semanas para defender el plan. A principios de mes fue el viceconsejero Javier Dean, y ayer, el propio consejero, quien dijo que el desarrollo de Andra Mari "es la única esperanza" para evitar el "éxodo de los vecinos del municipio".

Madrazo quiso tranquilizar a los cerca de 500 vecinos de este barrio, que residen en un centenar de caseríos y viviendas familiares, al afirmar que "se respetarán" sus hogares. Agregó que quienes deseen marcharse de la zona recibirán indemnizaciones y serán realojados en lugares cercanos. Los afectados no se creen las afirmaciones de las autoridades, ya que en un documento del avance urbanístico se apuntaba el derribo del 75% de las viviendas existentes.

Una decena de miembros

El consejero de Vivienda explicó ayer que el consejo asesor urbanístico, una figura contemplada en la Ley de Suelo aprobada el pasado año, comenzará a funcionar en abril y estará formado por una decena de personas: el alcalde, los concejales de Medio Ambiente y Urbanismo, un técnico municipal y siete miembros de asociaciones de vecinos, ecologistas, sindicatos, comerciantes y empresarios, mujeres, discapacitados y grupos juveniles.

El proyecto de Andra Mari "será el auténtico pulmón verde y de servicios para la gente", dijo Madrazo en respuesta a los vecinos que argumentan que el plan supondrá la desaparición de la única zona no urbanizada de la localidad. Enfatizó que se posibilitará la participación en el desarrollo urbanístico de toda la ciudadanía, "y no sólo los vecinos del lugar, a fin de evitar que trasladen mentiras y tergiversaciones".

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El colectivo vecinal, que hace un mes reunió a 4.000 personas en la primera manifestación contra el proyecto, ha censurado la falta de debate sobre este asunto, una carencia que es admitida en privado por el equipo de gobierno. Exigen que se abra un periodo de negociación, en que el plan quede paralizado, "y se piense en el conjunto de la población".

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