Los expertos no detectaron la bomba de Vallecas tras revisar cuatro veces la estación de El Pozo
Los artificieros de la policía revisaron en cuatro ocasiones el tren atacado en la estación de El Pozo del Tío Raimundo sin detectar la famosa bomba que acabó siendo desactivada en un parque junto a la comisaría de Vallecas, tras un extraño periplo por Madrid. "Si se llevaron la bolsa antes, no lo sé, pero de lo que sí estoy convencido es que tras la revisión de los Tedax no había ninguna mochila con explosivos" en El Pozo, aseguró el inspector jefe Cáceres, de la Brigada Provincial de Artificieros de Madrid. Eso sí, en esa misma estación fue explosionada una bomba muy similar la misma mañana del 11-M, con un teléfono móvil y con el explosivo dentro de una bolsa de basura azul clara.
Los Tedax que comparecieron ayer soslayaron cómo pudo llegar la mochila desactivada hasta la comisaría. El comisario Juan Jesús Sánchez Manzano, entonces jefe de la Unidad Central de Desactivación de Explosivos, subrayó que se enteró de su existencia cuando lo llamaron a las 2.30 de la madrugada del 12 de marzo para informarle de su hallazgo, pero de lo que pasó en El Pozo apenas sabía.
"Yo en El Pozo no sé cuántas bolsas se abrieron", explicó, antes de precisar que, sobre las 8.30 sí se encontró un artefacto, dentro de una mochila, en la que los Tedax vieron el móvil y la bolsa de basura. Mucho más preciso fue Cáceres, quien insistió en todo momento en "el gran caos" que vio en las estaciones atacadas. "En El Pozo localizaron una bolsa, y los artificieros miraron dentro y vieron un teléfono. Como ya teníamos la experiencia de otra bolsa que se nos fue al intentar desarmarla en Atocha, se utilizó otro método, pero también falló". Para este mando policial, los artificieros hicieron "lo correcto", aunque calificó de "fracaso" que no lograran desactivarla.
Cáceres insistió en que el tren de El Pozo fue revisado de cabo a rabo "hasta cuatro veces" pero nadie detectó la mochila famosa. "Si alguien sacó la bolsa antes, pues la sacó antes", pero cuando sus hombres hicieron la revisión completa, tanto de los trenes como de lo que había amontonado en los andenes, "no había ninguna mochila con explosivos" en dicha estación.
El inspector jefe aclaró que junto a la mochila desactivada también se llevaron a la comisaría "un montón de bolsas", que sus agentes también revisaron por si había más bombas. Negativo, no había.
