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La batalla eléctrica

Una empresa "fuerte e independiente", según Solbes

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, negó ayer que el acuerdo alcanzado entre E.ON, Acciona y Enel suponga la división de la primera eléctrica española, sino que se trata de una "reubicación de activos" de Endesa. Para el ministro de Economía y Hacienda, el pacto entre los contendientes permitirá "una Endesa fuerte e independiente en el futuro".

La entrada de E.ON en el mercado español es una buena noticia para Solbes. El vicepresidente segundo aseguró que el Ejecutivo "se felicita" por la llegada de la eléctrica alemana, ya que ofrece "enormes posibilidades para el futuro" y añadió que la empresa va a constituir "un elemento adicional muy positivo dentro del mapa energético español".

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Tras reiterar que el Gobierno "respeta las decisiones empresariales como siempre", Solbes apuntó que este acuerdo exige que las empresas implicadas cumplan con todos los procedimientos administrativos y comunitarios referidos a la competencia.

A este respecto, el vicepresidente segundo añadió que el Ejecutivo "va a prestar especial atención en todo lo que al acuerdo se refiere", para "garantizar la competencia, el suministro y en definitiva favorecer a los consumidores".

En España, la Comisión Nacional de la Energía (CNE) deberá autorizar la futura OPA que, en su caso, formulen Enel y Acciona sobre el 100% de Endesa a un precio de al menos 41 euros.

Un "destrozo" para el PP

Las reacciones desde el Partido Popular no se hicieron esperar. El líder del PP, Mariano Rajoy, en un mitin en Santa Cruz de la Palma, dijo Zapatero se oponía a la entrada de la alemana E.ON porque "quería campeones nacionales" y "se trajo a una empresa pública italiana", Enel; "después Zapatero anuncia un final feliz y ahora nos enteramos de que la alemana y la italiana se han repartido la empresa", enfatizó. "A los alemanes les toca lo que teníamos en España, Francia, Italia, Polonia y Turquía, una empresa que se llama Viesgo y parte de Endesa y a los italianos todo lo demás".

Por su parte, el responsable de Energía del sindicato UGT, Manolo García, dijo que el acuerdo entre E.ON, Enel y Acciona "genera una gran preocupación por el futuro de los trabajadores de Endesa, ya que el proyecto industrial de la eléctrica no sale fortalecido" y avanzó que los nuevos gestores deberán realizar un esfuerzo financiero muy fuerte que tendrán que recuperar".

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