"Marca diferencias en las segundas partes"

Dice Fabio Capello que en la vida no hay nada definitivo. Lo manifestó el sábado, cuando negó que una posible derrota contra el Sevilla obligara al Madrid a bajar del tren de la Liga. "En la vida, nunca se sabe...", dijo. Debió de volver a pensarlo anoche, en el estadio Bernabéu, antes de mandar a Guti que hiciera ejercicios de calentamiento. El conjunto blanco iba perdiendo y sufría la presión sevillista cuando el centrocampista tomaba la banda junto a Higuaín y Helguera. Debió de pensar Capello que, "en la vida, nunca se sabe" y decidió quitar a Raúl.

El cambio fue la clave del partido. Guti sirvió en una bandeja y con dos pases preciosos el primer gol de Van Nistelrooy y el de Robinho poco después. Él fue, en efecto, quien dio al conjunto blanco lo que le estaba faltando en el centro del campo. Profundidad y verticalidad. Pero Capello quitó importancia a la permuta. O, mejor dicho, no quiso dar demasiados detalles sobre la salida de Rául. "Es que se ha entrenado poco durante toda la semana", se limitó a decir el técnico italiano.

"Cuando Guti entra en la segunda parte, siempre marca la diferencia", intentó explicar Capello. Pero negó que el centrocampista, que lleva tres partidos seguidos sin salir en el once titular -desde que fue expulsado contra el Celta-, ya no esté para jugar los 90 minutos. "No vamos a discutir ahora su calidad. Claro que puede jugar un partido entero. Simplemente, digo que en los últimos tres encuentros que ha disputado ha marcado las diferencias cuando ha entrado en las segundas partes", matizó.

Acto seguido, Capello aseguró que el Madrid había mejorado en conjunto. "No sólo Guti ha sido importante. También lo ha sido el cambio de banda de Cicinho. Decidí llevármelo a la izquierda y poner a Sergio Ramos por la derecha porque allí es donde en ese momento necesitábamos más fuerza", destacó.

Y es que Capello temía al Sevilla. Sobre todo, desde el punto de vista físico. "No era fácil. Hay que decir las cosas como son. Hemos hecho el partido perfecto porque el Sevilla es un gran equipo, muy fuerte físicamente y muy bueno tácticamente", analizó. "Si no ha podido con nosotros es porque hemos tenido muchas ganas y mucho espíritu de equipo", abundó.

Pese a ello, para Juande Ramos, su homólogo sevillista, la única diferencia entre los dos cuadros fueron los goles. "El Madrid ha obtenido mucha rentabilidad de un balance ofensivo escaso. Nosotros lo hemos hecho todo. La clave del partido es que ellos han marcado tres goles y nosotros dos. En el fútbol, lo que cuenta es eso: el número de goles", argumentó.

Si por un lado reconoció que el cambio de Guti había hecho variar el panorama del encuentro -"acertó con los pases, encontró los huecos perfectos", dijo-, por otro negó Juande que el Sevilla perdiera el equilibrio en la segunda parte. "La sensación que tengo es que lo único que hemos perdido es la posibilidad de ganar el partido. Alves tuvo dos ocasiones en el segundo periodo, pero no acertamos", explicó. Tampoco quiso justificar la derrota de su equipo por el cansancio acumulado tras la semifinal de la Copa de la UEFA contra Osasuna. "No jugamos en un estado de frescura total, pero hemos hecho un esfuerzo para sacar el partido adelante y hemos achuchado hasta el último momento", rubricó.

Capell, sigue sin querer hablar del Barça: "Nos quedan cinco finales y hay que empezar a pensar ya en el Espanyol. He visto su partido contra el Atlético y no va a ser fácil batirle".