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La Copa sólo seguirá en Valencia si se frena la ampliación del puerto industrial

Bonnefous dice que ACM se opone a ver "1.000 camiones diarios" entrando en la dársena

El dueño del Alinghi, Ernesto Bertarelli, lo venía advirtiendo y ayer su mano derecha, Michel Bonnefous, presidente de ACM, lo confirmó: la Copa del América sólo seguirá en Valencia si se anula la ampliación prevista del puerto industrial. "Esa es la clave que podría afectar nuestra motivación", dijo Bonnefous, que no ve otros inconvenientes ni financieros ni de incompatibilidad con el circuito de fórmula 1 previsto para 2006. Bonnefous se opone a ver "1.000 camiones diarios entrando en el puerto" por las obras. La pelota está en el tejado de la Administración, especialmente del presidente Camps.

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¿Qué es lo que quiere Valencia? ¿Un puerto deportivo y turístico o uno industrial? ¿Mónaco o Rotterdam? La Copa del América seguirá en Valencia solamente si no se acomete la ampliación comercial prevista en el puerto. Esa es la exigencia de Bertarelli a las autoridades españolas, con las que negocia para tomar una decisión lo antes posible. "1.000 camiones diarios entrando en el puerto podría afectar el sistema de vientos", explicó ayer Bonnefous en la Cadena SER.

Bertarelli pretende que la dársena se convierta en una zona deportiva y turística. La autoridad portuaria y la patronal valenciana, por el contrario, exigen una ampliación que permita convertir la ciudad en "la gran plataforma logística del Mediterráneo". La pelota está en el tejado de las tres autoridades implicadas, el Ayuntamiento, la Generalitat y el Ministerio de Administraciones Públicas, pero sobre todo en la del presidente autonómico, Francisco Camps, en medio de los dos potentes grupos de presión. Lo que es seguro es que la 33ª edición de la Copa será en Europa y que, en caso de que fuera en Valencia, se decidirá en los próximos días y se celebrará en 2009. El tope para la elección de la nueva sede es el 31 de diciembre.

Camps ha apostado muy fuerte por la Copa, al igual que la alcaldesa, Rita Barberá, pero tampoco quieren enfrentarse al poder empresarial valenciano. Ambos han guardado silencio estos días. En el Ayuntamiento estudian la situación y barajan la posibilidad de que el crecimiento previsto por el puerto se demore hasta después de 2009. Frente al plan del puerto, que rechaza la alternativa de crecer en Sagunto, el circuito urbano de fórmula 1 previsto para el próximo año no sería incompatible con el torneo de vela más prestigioso del mundo, según Bonnefous.

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Tanto a Bertarelli como a las autoridades les interesa llegar a un acuerdo. Camps y Barberá ya se cobraron su rédito en las pasadas elecciones autonómicas. Y al dueño del Alinghi le ha salido una 32ª edición magnífica en aguas de Valencia, con beneficios por todos lados. Mientras, 1.500 familias están en vilo. Los familiares de los trabajadores de los equipos -ya hay ocho que han confirmado su deseo de continuar-, así como los empleados de ACM. Todos pendientes de la gran decisión. Entre ellos, los integrantes del Desafío Español, convertido en Challenger of Record, primer desafiante de la próxima edición tras firmar el protocolo de la misma con el Defensor. "Para poder ser un equipo grande tenemos que dar pasos adelante y éste es uno de ellos", dijo Agustín Zulueta, director deportivo del Desafío, blanco de críticas de los expertos, que entienden que el equipo ha cedido a los intereses del Alinghi.

"La neutralidad del organizador se pierde", según un experto consultado, "porque ACM ya no tiene la obligación de organizar el evento sin beneficiar al Alinghi. Destrozan el sistema de justicia deportiva". "No hemos sido marionetas", se defendió Zulueta, "hemos forzado a que se decida pronto la nueva sede, a que sea en Europa, y a que se fije un mínimo de 18 meses desde la aparición de la nueva clase de barcos hasta la competición". Esta es la gran novedad de la nueva edición: una nueva clase de barcos, de 90 pies (unos 30 metros) y 6,5 metros de calado, "más grandes, más rápidos y más difíciles de navegar", según el táctico del Alinghi, Brad Butterworth, "y los tripulantes tendrán que ser más fuertes".

Por último, Manuel Chirivella, presidente del Club Náutico Español, explicó por qué se creó a toda prisa esta entidad. "[Para ser Challenger of Record] era importante desde el punto de vista legal que fuera un club y no la federación. Podría chirriar que fuera la federación la que respaldara el proyecto como en la pasada edición". El equipo español estará respaldado por el patrocinio de Iberdrola, que aportará "unos 30 millones anuales para estar entre los tres primeros", dijo Zulueta. El resto de patrocinadores no se incorpora hasta que se sepa la sede del torneo.

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