Dinero y tierras en Bagdad
El Gobierno iraquí se apresuró el lunes a premiar a los jugadores de la selección nacional de fútbol con 10.000 dólares (unos 7.300 euros), tras su triunfo en la Copa Asia. El capitán y jugador estrella, Yunis Mahmud, recibirá paga doble.
El Parlamento se reunió en Bagdad y aprobó la entrega a cada miembro del equipo de una parcela de 400 metros cuadrados en la capital iraquí.
El viaje de vuelta tenía previsto traerlos a Jordania, pero el jeque de Dubai, Mohamed bin Rashid, les organizó un recibimiento de lujo en el emirato árabe. De la clase turista pasaron a un vuelo en primera clase y a una fiesta con aficionados iraquíes en Dubai.
Sin embargo, los jugadores iraquíes no podrán celebrarlo en las calles iraquíes. "Me gustaría tener una recepción en nuestro país como el resto de equipos cuando ganan un torneo, pero tememos por nuestra vida. Si vuelvo a Irak, cualquiera podría herirme o matarme. Uno de mis mejores amigos fue detenido hace un año y nadie sabe dónde está", dijo ayer el capitán Yunis Mahmud.
Pese a las reticencias de los jugadores, las autoridades iraquíes intentaron persuadir a los futbolistas para que volvieran a Irak. "Los jugadores no deberían preocuparse, tenemos sitios seguros en Bagdad", afirmó el portavoz del Gobierno, Alí Dabbagh.
Siempre resulta más sencillo encontrar amigos tras una victoria.
