El PSOE entrega el Gobierno de Navarra a los aliados del PP
Blanco ordena a los socialistas que faciliten la investidura de Miguel Sanz
La Ejecutiva Federal del PSOE no dio opciones a mayores debates, y entregará el Gobierno de Navarra a UPN, el partido aliado del PP. El secretario de Organización, José Blanco, ordenó ayer a los líderes de los socialistas navarros Carlos Chivite y Fernando Puras dar marcha atrás y poner fin a las negociaciones que mantenían con Nafarroa Bai. Las instrucciones son precisas: deberán facilitar con su abstención que UPN, la fuerza más votada, siga al frente del Gobierno de la comunidad foral. El PSOE pierde así la oportunidad de arrebatar esa comunidad al PP, una opción que podía acarrearle un gran coste electoral en las generales de 2008.
Los socialistas navarros fueron desautorizados, durante la reunión de urgencia que se celebró en la sede de la calle de Ferraz de Madrid, para seguir adelante con su plan para gobernar con los nacionalistas. Chivite y Puras regresaron a Pamplona resignados pero acatando el fallo. Ahora tendrán que permitir que Miguel Sanz siga gobernando. La decisión, que desencadenó anoche la protesta de medio millar de militantes ante la sede del PSN, incluye hacer una oposición "útil y responsable".
Sanz olvidó ayer el decálogo de condiciones que puso hace pocos días para gobernar en solitario -que incluía el compromiso de no presentar una moción de censura-, y saludó con entusiasmo, al igual que el PP, la imposición de Ferraz.
