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Los escándalos urbanísticos

Una crisis que descabalgó al PP de la alcaldía

Javier Martín-Arroyo

La crisis provocada por la caótica gestión urbanística en Ogíjares, al frente de la que estuvo el diputado José Luis del Ojo, hizo perder al PP la alcaldía en esta pequeña localidad a las afueras de Granada. Tras las continuas denuncias, Del Ojo dimitió hace un año de sus cargos en el Ayuntamiento y posteriormente el pasado enero fue destituido como presidente del comité electoral del PP en Granada, después de que saltara a los titulares de prensa la adjudicación de la construcción del pabellón municipal por un millón de euros más de lo aprobado en el pleno del Consistorio.

La dirección provincial del PP defendió entonces que los polémicos asuntos estaban circunscritos a la política local, por lo que no consideraba que debía dimitir de su cargo como diputado.

El pasado enero se conocieron más detalles jugosos: un promotor reconoció en una carta la contratación ilegal de obras en el Consistorio y el fraccionamiento de las mismas en facturas inferiores a 30.000 euros pactado con Del Ojo para así evitar sacar las obras a concurso. Tanto el arquitecto como el ingeniero municipales reconocieron que el primer presupuesto fue una valoración inicial para optar a una subvención de la Junta, pero que todas las partes eran "conscientes" de que se trataba de una cifra "ficticia".

El papel jugado por Del Ojo en las presuntas irregularidades se desvelaba a medida que trascendían más detalles de la laboriosa investigación. Ante el fiscal han declarado en total quince personas, siete de las cuales poseen algún tipo de responsabilidad penal, según el Ministerio Público. El ex alcalde, Francisco Plata, defendió a principios de año la labor de su ex concejal: "No pienso consentir que nadie cuestione la legalidad de la actuación del señor Del Ojo, de la que no tengo la más mínima duda".

El regidor detalló incluso en rueda de prensa las pruebas de la inocencia de su ex edil junto a los técnicos municipales, que explicaron el desfase entre los presupuestos. A medida que avanzaba la investigación y los concejales declaraban ante la Fiscalía, Plata se dio cuenta de que el escándalo le salpicaría y moduló su discurso convenientemente. Comenzó a cuestionar la gestión urbanística de Del Ojo ante el PP provincial y a denunciar que ningún dirigente atendía sus ruegos. El enfrentamiento soterrado se hizo público y denunció a dos ediles ante la Guardia Civil por inducir a la publicación de un panfleto en el que se le insultaba. Las octavillas difundidas tildaban al regidor de "dictador y traidor", además de acusarle de "acosar" a mujeres. Finalmente, Plata abandonó el PP y anunció una candidatura independiente para las elecciones municipales, Alternativa Popular por Ogíjares. Los votantes castigaron tanto la apuesta personal de Plata como al PP, y el PSOE se alzó con la alcaldía de Ogíjares contra todo pronóstico.

El próximo capítulo del culebrón urbanístico estrella en Granada, junto a la chapucera trama descubierta en Alhendín, será la declaración del diputado ante la Fiscalía del Tribunal Supremo. El pasado enero confesó a este diario en una entrevista: "Granada está llena de irregularidades de ediles y no pasa nada. Al Tribunal Supremo le voy a decir que es todo un invento del PSOE".

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Sobre la firma

Javier Martín-Arroyo
Es redactor especializado en temas sociales (medio ambiente, educación y sanidad). Comenzó en EL PAÍS en 2006 como corresponsal en Marbella y Granada, y más tarde en Sevilla cubrió información de tribunales. Antes trabajó en Cadena Ser y en la promoción cinematográfica. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla y máster de EL PAÍS.

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