Detenidos dos jefes de Batasuna por reincidir en convocar manifestaciones de apoyo a ETA
El dirigente de Batasuna Joseba Álvarez y la portavoz de Askatasuna, Oihana Agirre, fueron detenidos ayer en San Sebastián por orden del juez Baltasar Garzón, que los acusa de reincidencia en el delito de pertenencia a banda armada, por participar y convocar la manifestación en apoyo de presos de ETA (ilegal y prohibida) del pasado 9 de septiembre en la capital donostiarra. La marcha fue impedida por la Ertzaintza y acabó con graves incidentes callejeros. Los arrestos, llevados a cabo por el Cuerpo Nacional de Policía, han sido realizados más de 20 días después de que, por el mismo motivo, fuera detenido y encarcelado el también dirigente abertzale y entonces portavoz de Askatasuna, Juan María Olano.
Los dos arrestados, trasladados anoche a Madrid, comparecerán mañana ante el juez de la Audiencia Nacional
La captura del dirigente 'abertzale' y la portavoz de Askatasuna se suma a la de Olano, los tres por la misma protesta
Garzón acusa a Joseba Álvarez y Oihana Agirre de reiteración delictiva por convocar a la marcha del día 9 en San Sebastián
Las detenciones de ayer se produjeron a primera hora de la tarde cerca de los domicilios de ambos, que fueron registrados. Un grupo de jóvenes radicales provocó incidentes cuando los agentes se hallaban en la casa de Álvarez. Los concentrados insultaron a los policías que custodiaban la zona y, cuando el dirigente de Batasuna y responsable de sus relaciones internacionales salió a la calle bajo custodia, los jóvenes se abalanzaron sobre los vehículos policiales, que fueron pateados.
Los informes policiales recabados por Garzón tras la manifestación del 9 de septiembre han sido determinantes para la operación. El magistrado entiende que Álvarez y Agirre han incurrido en reincidencia delictiva, por su participación en la manifestación de Askatasuna (colectivo de apoyo a los presos etarras, ilegalizado), que iba encabezada por una pancarta en la que se pedía la libertad para los presos de ETA enfermos o que han agotado su condena.
"Desafío" terrorista
Entre los que portaban la pancarta estaba Juan María Olano, quien junto a otros manifestantes arremetió contra los ertzainas. Olano, ex parlamentario de Sozialista Abertzaleak, fue detenido casi de inmediato y el juez Garzón ordenó su ingreso en la prisión de Soto del Real (Madrid), por haber reiterado su actuación al frente de Gestoras pro Amnistía o su sucesora, Askatasuna, lo que constituye delito de pertenencia a banda terrorista y "un auténtico desafío a las instituciones incitando a la comisión de delitos terroristas".
Ahora les ha llegado el turno a Álvarez y Agirre, que anoche fueron trasladados a Madrid. Inmediatamente después de las detenciones, Askatasuna anunció la convocatoria, para las ocho de la tarde de ayer, de dos manifestaciones de protesta en San Sebastián, una con arranque en la plaza de la Constitución y la otra desde el barrio de Egia. El portavoz de Batasuna, Joseba Permach, calificó las detenciones de "operación política contra el independentismo" y aseguró que la única oferta que hace el Gobierno al País Vasco es "Constitución y represión".
Los dos detenidos serán llevados mañana ante Garzón, quien, tras interrogarles, decidirá si los deja en libertad, con una u otra cautela, o los envía a prisión. Lo más probable es esto último, según las fuentes consultadas. Garzón decidió a mediados de septiembre mantener en la cárcel a Olano, ya que entendía que si lo dejaba en libertad reincidiría en la convocatoria y participación en actos delictivos.
El juez ya procesó el último día de febrero de 2005 a Álvarez (junto a Joseba Permach y José Antonio Urrutikoetxea, Josu Ternera) por integración en banda terrorista como miembros de Batasuna. Álvarez, que estaba en libertad, está pendiente de que la Sala fije una fecha para el inicio del juicio oral, junto a otras 38 personas por integración en organización terrorista, por la presunta subordinación a ETA de la formación ilegalizada y la financiación de la banda a través de su red de herriko-tabernas.
El juez considera que la manifestación del 9 de septiembre fue "un desafío a las instituciones, incitando a la comisión de delitos terroristas", un reto que se emarcaba, según el auto de prisión de Olano, "en el conjunto de acciones terroristas gravísimas desarrolladas por ETA".
Por otro lado, el Tribunal Supremo ha confirmado las penas de siete años de inhabilitación impuestas al ex alcalde de Batasuna en Andoain (Guipúzcoa) José Antonio Barandiarán y al ex edil de Servicios Sociales Jesús María Olazabal por autorizar la compra de un ordenador para un preso de ETA sin conocimiento del pleno.
