_
_
_
_
_

Los corazonistas carecen de licencia para hacer aparcamiento en el patio

El Ayuntamiento sólo autorizó la reforma de la antigua zona de recreo

El colegio del Sagrado Corazón, el mismo al que se le desplomó el techo del salón de actos el pasado 25 de diciembre como consecuencia, en parte, de haber construido una cancha de baloncesto en la azotea ilegalmente mientras se hacía obra en el patio, tampoco tiene licencia para construir un aparcamiento subterráneo bajo la antigua zona de juego. Es decir, ha iniciado sin permiso esa obra que incluye, además, levantar un polideportivo. Un desaguisado ejecutado a 10 metros de las ventas de la Gerencia de Urbanismo.

Así lo demuestra el reciente informe de la Junta Municipal de Chamartín que descarta dar licencia: "Se propone la denegación (...) a la solicitud de ampliación bajo rasante destinadas a dotar al edificio de uso de equipamiento educativo privado de una serie de instalaciones, tales como pista polideportiva, dos plantas de garaje-aparcamiento dotacionales al edificio, como cambios en la ubicación de la piscina y creación de dependencias auxiliares".

El PSOE pedirá que Pilar Martínez explique por qué no hubo inspecciones
Más información
Educación pondrá 500.000 euros para transportar a los corazonistas
Los alumnos de Infantil del Sagrado Corazón, sin clase por la falta de licencia

En segundo lugar, lo demuestra también la licencia que sí obtuvo el colegio el mes pasado (con las obras ya iniciadas) sólo para arreglar el patio y que blandía, hasta ahora, como autorización válida.Lo que la Junta autorizó a hacer al Sagrado Corazón en diciembre, meses después de que las obras hubieran comenzado, era un "forjado a lo largo de toda la superficie del patio, previo rebaje a cielo abierto de dos metros de altura del terreno existente para el alojamiento de cerchas". Nada de un aparcamiento subterráneo que una constructora explotaría y a cambio del cual el colegio recibiría un polideportivo nuevo. Porque eso es, según confirmaron ayer padres del centro, lo que el Sagrado Corazón quería hacer y que así explicó a las familias de sus alumnos.

Guillermo Maylin, el religioso corazonista responsable del colegio concertado de la calle de Alfonso XIII, concede que no existe el permiso para construir el garaje subterráneo aunque sus obras estén muy avanzadas: "Todavía no se ha llegado a ello. Es un proceso largo y no ha concluido", alegaba ayer. Maylin justifica el inicio de las obras sin el pertinente permiso en que "de alguna forma estaba ya concedido". ¿De qué forma? "Bueno, yo no soy el experto en estos temas", zanjaba. Los expertos son los de la empresa Aedificat, responsable de la edificación. Pero éstos ya han advertido a este periódico de que no piensan hablar sobre este asunto. De momento, lo que sí han hecho es eliminar de su página web toda la información sobre la obra del Sagrado Corazón que aparecía antes del derrumbe.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Lo que el responsable del colegio considera que es de facto como una concesión municipal es sólo un permiso para rehacer el patio y su cerramiento. Desde la Junta de Chamartín se precisa que la licencia que tiene otorgada el colegio es para hacer un vaciamiento y recubrir con una techumbre de vigas. Así pues, tampoco se habla en absoluto de aparcamiento. Ésta sería, según ellos, la última autorización que ha recibido el colegio.

"Para rehacer un patio no es necesario una estructura tan cara y complicada como la que han solicitado hacer. Hay soluciones mucho más sencillas y baratas. Da la impresión de que están haciendo la estructura del aparcamiento", apunta una arquitecta consultada por este periódico. En su valoración, la misma experta, añade que, a tenor de la licencia obtenida, la estructura metálica levantada no debería sobrepasar la altura antigua del patio.

El origen del desaguisado urbanístico radica en la decisión del colegio de ceder su patio a la empresa Aedificat para que ésta construyera un estacionamiento subterráneo. Su siguiente paso fue construir, también sin licencia, el nuevo patio sobre un ala del colegio cuya cubierta se derrumbó el día de Navidad. Según el Ayuntamiento, la conversión de la azotea en patio contribuyó al derrumbe. Dicho documento señalaba como causa esencial del colapso, los fallos en la ejecución de las vigas de apoyo de la cubierta del patio. Pero también remarcaba que "el incremento de cargas que supuso la creación de las pistas deportivas contribuyó al colapso".

Desde el PSOE en el Ayuntamiento y a través de su portavoz David Lucas, se va a solicitar la comparecencia de Pilar Martínez, responsable del área de Urbanismo municipal. En opinión de los socialistas es "muy grave que nadie inspeccionara las obras sin licencia y sin las inspecciones pertinentes". Una gravedad, a la que se suma, según el grupo socialista, el que la sede de Urbanismo municipal se encuentra a unos 10 metros del edificio hundido.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_