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Zapatero promete 150 kilómetros de Cercanías sin precisar dónde

La Comunidad de Madrid acusa al presidente de "vender humo"

Pilar Álvarez

"Una gran transformación para la comunidad de Madrid". Así definió ayer el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la propuesta de ampliar en 150 kilómetros la red de Cercanías, con una inversión de 5.000 millones. Zapatero, que acudió al acto de presentación de los candidatos del PSOE por Madrid, señaló que ampliarán cinco líneas ya existentes -sin precisar los tramos-. Si ganan las elecciones de marzo, prometió además una nueva línea de suroeste a noroeste con 20 estaciones. El vicepresidente segundo de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, le acusó de "vender humo" con una propuesta que "ni siquiera" aparece recogida en los presupuestos generales de 2008.

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Las líneas que el PSOE propone ampliar son: C-1 (Alcalá de Henares -Alcobendas-San Sebastián de los Reyes), C-3 (Atocha- Aranjuez), C-5 (Móstoles-El Soto-Atocha- Fuenlabrada-Humanes), C-7 ( Alcalá de Henares- Atocha- Chamartín-Príncipe Pío- Colmenar Viejo) y C-8 (Atocha-Chamartín-Villalba). Esta propuesta se asemeja bastante a las peticiones reiteradas en los últimos años por la Comunidad de Madrid, que coinciden en cuatro líneas para las que dibujan extensiones concretas. El Ejecutivo de Aguirre considera "urgente" la extensión de la C-1 desde San Sebastían de los Reyes a El Molar, la prolongación de la C-5 de Humanes a Griñón, de la C-7 a Soto de Real desde Colmenar Viejo y la C-8 desde Cabezuela a Guadarrama. La red de trenes regionales de Madrid ha sufrido un importante aumento de viajeros en la última década. De los 60 millones de viajes anuales en 1986 se ha incrementado a 204 millones en 2006, según datos de la Comunidad.

Fuentes socialistas indicaron que el plan de Cercanías perfilado por Zapatero está previsto desde hace meses. El presidente lo adelantó ayer, un día después de que un "error" en las obras que el Ministerio de Fomento ejecuta en Sol para construir la futura macroestación de Cercanías abriera un agujero en un pasillo del metro. La última vez que Esperanza Aguirre y José Luis Rodríguez Zapatero hablaron cara a cara del futuro de los trenes en Madrid fue durante la reunión que mantuvieron en Moncloa el pasado septiembre. En aquel encuentro quedó aparcada la posible cesión de la gestión al Gobierno regional, un asunto al que tampoco aludió ayer el presidente. El pasado octubre, el consejero de Transportes de la Comunidad, Manuel Lamela, solicitó al secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, 90 kilómetros más de ferrocarril regional, con 18 estaciones nuevas, la remodelación de otras 11 y 31 aparcamientos disuasorios.

El pasado marzo, dos meses antes de las elecciones regionales y locales, el entonces candidato socialista a la Comunidad, Rafael Simancas, anunció un plan más ambicioso que el de ayer en el número de kilómetros -con 200 que sumar a los 400 que tiene ahora la red- y más recatado en la inversión, 4.000 millones.

Zapatero y Trinidad Jiménez, durante la presentación de la candidatura socialista.
Zapatero y Trinidad Jiménez, durante la presentación de la candidatura socialista.CLAUDIO ÁLVAREZ
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Sobre la firma

Pilar Álvarez
Es jefa de Última Hora de EL PAÍS. Ha sido la primera corresponsal de género del periódico. Está especializada en temas sociales y ha desarrollado la mayor parte de su carrera en este diario. Antes trabajó en Efe, Cadena Ser, Onda Cero y el diario La Opinión. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Sevilla y Máster de periodismo de EL PAÍS.

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