Una imagen vale más de diez millones de euros
Imagen es la palabra mágica en Vizcaya. Mediante la imagen, el Athletic ha conseguido 10,5 millones en seis años procedentes de la Diputación Foral de Vizcaya y 450.000 euros del Gobierno vasco, todos ellos discutidos por el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas. Dinero a cambio de imagen pública de Vizcaya que se explícita en publicitar Vizcaya en Vizcaya y aportar un logotipo en las ruedas de prensa de fuera de la comunidad autónoma. El Gobierno vasco fue más lejos en 2004 y concedió 450.000 euros al Athletic para que luciera el logotipo de Euskadi en su camiseta en los partidos de la Copa de la UEFA: el Athletic jugó contra el Trabzonspor turco y el Austria de Viena.
Las ayudas monetarias al Athletic se iniciaron en el mandato de Javier Uría cuando consiguió de Josu Bergara un convenio de seis millones de euros por cuatro años a cambio de lucir la palabra Vizcaya en la camisola de entrenamiento y en las conferencias de prensa dentro y fuera del territorio. La realidad es que las arcas rojiblancas arrastraban un déficit alarmante y un problema serio de tesorería. La institución foral fue en auxilio del Athletic, que imputó la totalidad de la ayuda en el primer ejercicio para reordenar unas cuentas más que problemáticas. La ayuda se ha institucionalizado. En el mandato de Ana Urquijo (tras la dimisión de Lamikiz), la Diputación, con el mismo objetivo, concedió una ayuda de dos millones al Athletic (por ejercicio), que finalmente se ha convertido en 2,5 millones en el primer año de Fernando García Macua. "Con el dinero de esos acuerdos se sufragaban los gastos de 320 ancianos en una residencia o cinco kilómetros de autopista", decía Josu Montalbán en 2005.
Las ayudas al Athletic o al Bilbao Basket se han institucionalizado
Todo apunta a que las subvenciones a cambio de imagen van a proseguir, toda vez que la Diputación también se ha implicado en la construcción de San Mamés (junto a BBK y Athletic), un proyecto de 180 millones a partes iguales. El argumento del Athletic es que de no haberlo hecho con las instituciones (se espera la participación del Gobierno vasco), "nunca se hubiera podido realizar". Al mismo tiempo se reconoce que el futuro del Athletic pasa inexorablemente por una ampliación de San Mamés, es decir de la masa social para hacer frente a una deuda creciente que no frena desde hace años y se acerca a lo que se considera una quiebra técnica. Nada ha afectado a esta política de ayudas al primer club de la provincia. Ni siquiera el fraude fiscal en el que habían incurrido el Athletic desde 1997, valorado en 7,1 millones ha alterado la situación
Pero el Athletic no ha sido el único beneficiado por las ayudas forales a los clubes singulares. El Bilbao Basket de baloncesto recibirá 3,5 millones entre 2006 y 2009. Antes de ascender a la ACB recibía 400.000 euros Además, disfrutará del uso del Palacio de Deportes de Miribilla, una instalación necesaria, que tendrá al Bilbao Basket como principal usufructuario.
