_
_
_
_
_

Un chatarrero muere al explotarle en la cara una bombona que manipulaba

El hombre descargaba materiales de su furgoneta en una calle de Carabanchel

Rebeca Carranco

Félix murió ayer delante de su casa, en el número 10 de la calle de Alberca de Záncara, en el distrito de Carabanchel. Tenía 63 años. En el barrio todos le conocían, según explicó la dueña del quiosco de la esquina: "Andaba siempre con los gitanos, pero era payo. Vendía chatarra". Pero sus compañeros gitanos evitaron ayer las preguntas y las miradas. "No sabemos quién es", aseguró una mujer, con la melena negra azabache recogida con una pinza. A su lado, un joven no dejaba de llorar.

Las primeras investigaciones de la policía apuntan a que fue un accidente
Más información
Herido grave un obrero tras caer de un séptimo piso en Madrid

Ocurrió a las tres menos cinco de la tarde. Un vecino llamó a la policía avisando de que un hombre yacía cubierto de sangre en la calle de Alberca de Záncara. Se trataba de Félix. Minutos antes de morir estaba descargando su furgoneta, llena de materiales que había recogido por la mañana. Una especie de bombona le estalló en la cara.

"Trabajaba con mi tío", aseguró una joven del barrio. Según ésta, Félix, el payo, estaba en el momento del accidente con su tío, que también se llama Félix, pero es gitano. La versión de la joven es que el fallecido tiró de una arandela y la bombona le estalló. "Le rebanó por aquí", explicó, dibujándose un círculo imaginario en torno a la sien. Las primeras investigaciones policiales apuntan a un accidente debido a un "artefacto con proyección pirotécnica".

Una vecina del número 4 de la misma calle, que prefirió no dar su nombre, lo vio todo desde el balcón de su casa: "Estaba comiendo y escuché la explosión y a un hombre gritar pidiendo auxilio. Salí a la ventana y entonces vi a otro tirado en el suelo, que aún se movía". Después, siempre según su versión, llegó la ambulancia. "Fue muy rápido. Su amigo decía 'llevaóslo', pero ya estaba muerto". El Samur sólo pudo certificar la muerte de Félix.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Al lugar se trasladó también una dotación de bomberos y los especialistas en explosivos del Cuerpo Nacional de Policía, que acordonaron la zona. El cuerpo yació en el suelo, delante de la furgoneta Iveco blanca, hasta las cinco y media de la tarde.

"Vamos, niña, vamos a la comisaría", musitaba ayer uno de los muchos gitanos que se apostaron desde las tres en la calle Alberca de Záncara. Llevaba cuatro horas aguantando el frío. Algo tenía que ver con Félix, el payo. Quizá también con el gitano. Pero no quiso especificar.

La pareja de chatarreros del barrio ya no volverá a trabajar junta. Los dos estaban en la furgoneta cuando se produjo la explosión. Pero sólo Félix el gitano podrá contarlo. Él resultó ileso.

La policía investiga el lugar de la explosión junto al cuerpo del hombre que falleció.
La policía investiga el lugar de la explosión junto al cuerpo del hombre que falleció.GORKA LEJARCEGI

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Rebeca Carranco
Reportera especializada en temas de seguridad y sucesos. Ha trabajado en las redacciones de Madrid, Málaga y Girona, y actualmente desempeña su trabajo en Barcelona. Como colaboradora, ha contado con secciones en la SER, TV3 y en Catalunya Ràdio. Ha sido premiada por la Asociación de Dones Periodistes por su tratamiento de la violencia machista.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_