Antonio Ferrera: "En banderillas he traspasado los límites"
El último trago que pasan los toreros en la plaza de Las Ventas no es delante del toro, sino delante de los reporteros. Si la cosa ha ido bien, no hay problema, pero si no han estado como ellos quisieran, salen discretamente pegados a una de las paredes, por ver si no se repara en ellos, lo cual no quiere decir que escurran el bulto cuando se les acerca un micrófono. No lo escurrió el maestro Esplá, aunque antes puso cara de pensar: ¡Rayos, me han pillado! "Me siento bien. Esto es Madrid, ¿no? Cuando no sale el toro que el público quiere, ese toro que reúne peligro e ingredientes para crear la emoción que el público necesita, pues...". Y marchó, ya definitivamente liberado, rumbo al descansadero del hotel.
Y lo cierto es que los de ayer son toreros que dan mejor media de sí mismos con ganado más complicado. Encabo explicaba así el comportamiento de sus enemigos: "El primer toro no tenía mala condición, pero le ha faltado un poquito de fondo y se ha acabado muy rápido. El segundo ha sido imposible: pegaba tarascadas, echaba la cara arriba todo el rato, pero bueno yo creo que se ha visto que, a nada que me salga un toro el próximo día, pues se puede cuajar".
Así las cosas, Antonio Ferrera aprovechó el tedio por el que discurría la tarde para dinamizarla un poquito en el último toro, que en eso es todo un experto y, de paso, cortar una orejita: "En el tercio de banderillas yo creo que he traspasado los límites. En los tres pares he estado con una pureza muy grande. Cuando uno está tan entregado y la espada te ha funcionado bien, pues la verdad es que es de esas orejas que te quedas muy lleno". Y apostilla: "Creo que estoy haciendo una temporada muy pura y de verdad; de esas que hacen crecer a los toreros".
