Los pilotos de F-1 se quejan del precio de las licencias

"El malestar entre los pilotos es enorme", comentó ayer una fuente de la asociación de pilotos de fórmula uno. La razón es la subida del precio de las licencias que les cobra la Federación Internacional de Automovilismo (FIA). En enero, los mejores pilotos recibieron una factura que rondaba los 230.000 euros. Con los baremos del año anterior, el precio no habría superado los 60.000 euros. Según la prensa británica, algunos pilotos han hablado de ir a la huelga en Silverstone, dentro de dos semanas -este domingo hay carrera en Magny Cours-, si la FIA no les aclara dónde va a parar todo este dinero.

"Me acabo de enterar", dijo ayer Fernando Alonso, quien no cree que se llegue a la huelga, pero que la hará "encantado" si así se decide. El baremo de 2008 consiste en un fijo de 10.000 euros por piloto, más 2.000 por punto en el último mundial. Kimi Raikkonen cobra unos 30 millones de euros; Alonso, unos 20; y Robert Kubica, alrededor de un millón.