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Quinta avería del año en la central nuclear de Cofrentes

La central nuclear de Cofrentes (Valencia) notificó ayer al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) una nueva parada no programada del reactor, debida en esta ocasión a la "alta presión" del mismo. Se trata de la quinta parada no programada en lo que va de año. Según una nota emitida ayer por el organismo encargado de velar por el buen funcionamiento de las centrales nucleares, el llamado "suceso notificable" -en la jerga del CSN- no supuso riesgo alguno para los trabajadores, ni para la población, ni para el medio ambiente.

El CSN informó de que la parada no programada se registró a las 10.50 horas y que se produjo por la "actuación del sistema de protección del reactor, debido a la señal de algo flujo neutrónico provocado por alta presión en el reactor". El incidente fue catalogado en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INE) como nivel 0 y "sin significación para la seguridad".

Más información
Prealerta en la central nuclear de Cofrentes por la apertura de una válvula

Los técnicos analizaban ayer las posibles causas que pudieron motivar la alta presión, según las fuentes citadas, que indicaron que todos los sistemas "actuaron según lo previsto".

Esta es la quinta notificación que los responsables de la central nuclear de Cofrentes, propiedad de la compañía eléctrica Iberdrola, han enviado al Consejo de Seguridad Nuclear en lo que llevamos de año. Así, en la mañana del pasado 13 de enero, Cofrentes redujo en un principio la potencia al 50% para normalizar los sistemas, atribuyendo el problema a "oscilaciones en la red eléctrica externa". Sin embargo, horas después se procedió a la desconexión total de la planta tras detectarse "una fuga en el sistema de muestras del circuito secundario". Pocos días después, el 25 de enero, el sistema de protección del reactor actuó, debido a un "alto flujo neutrónico" que se produjo "tras el cierre inadecuado" de una válvula. Tres días después, el 28 de enero, el fallo de otra válvula de control obligó a reducir la potencia a un 60%. Finalmente, el 8 de abril, la central nuclear informó de "la apertura de una válvula de alivio/seguridad, lo que supuso la declaración de prealerta de emergencia".

Tras la cuarta parada, en abril, Carles Arnal, portavoz de Els Verds Esquerra Ecologista, consideró que esta reiteración de sucesos "debe hacer reflexionar de una manera seria y rigurosa sobre la necesidad de cerrar ya la central". Arnal propuso adoptar "un calendario de cierre de las instalaciones, antes incluso de que acabe su vida útil".

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