_
_
_
_
_
Crisis financiera mundial | Los efectos en Europa

El FMI pide medidas para evitar una larga recesión

El Fondo Monetario Internacional (FMI) pidió a Estados Unidos y Europa que salgan rápido, con medidas enérgicas, al rescate del sistema financiero, para así proteger a la economía real y evitar la recesión. Un extremo que podría materializarse más pronto que tarde en EE UU, por la persistencia de las turbulencias.

El FMI tiene que remontarse a la Gran Depresión para encontrar un episodio similar al actual. La tensión en los mercados es la más intensa y extensa de los 113 casos identificados por sus economistas en las últimas tres décadas. De ese total, el 60% están relacionados con el sector bancario, los más peligrosos.

Charles Collyns, responsable del Departamento de Investigación del FMI, explica que este choque "representa una gran amenaza para el crecimiento global". El Fondo presentará el miércoles sus previsiones de crecimiento, que serán rebajadas.

Más información
El BCE empieza a estudiar bajadas de tipos ante la gravedad de la crisis

El diagnóstico es contundente: "La rápida expansión del crédito, la escalada del precio de la vivienda y el endeudamiento de los hogares y empresas aumentan la probabilidad de que las tensiones financieras vayan seguidas por una fuerte desaceleración".

Y lo que está por venir no es alentador: las desaceleraciones o recesiones precedidas por tensiones en el sector bancario provocan pérdidas acumulativas del PIB entre dos y tres veces mayores que las que tienen que ver con crisis bursátiles o monetarias. Sus efectos son también más prolongados, entre dos y cuatro veces más.

Caída del crecimiento

Aunque no anticipa números, advierte de que EE UU se encuentra en una posición complicada porque la convergencia de factores de riesgo es alta. "Cuando se sufre un largo periodo de estrés financiero, tiende a asociarse con una brusca caída del crecimiento", dijo Collyns.

Para la zona euro, las finanzas de las familias dan cierta protección a la economía. Pero no lanza las campanas al vuelo y mira a casos como el de España e Irlanda, donde la concesión de crédito está cayendo de forma pronunciada y el déficit exterior también plantea un factor de riesgo adicional. Ante esta situación, se pide a los Gobiernos occidentales que adopten medidas "enérgicas" para restablecer el flujo de capital en el sistema.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_