"Se valora el tiempo que hemos estado en el olvido"
Los cuatro años de cárcel y tortura no le sirvieron de escarmiento a Gervasio Puerta. Cuando salió de prisión en 1960, continuó en la clandestinidad con el Partido Comunista. Y un año después volvieron a cazarlo. "Lo más difícil era rehacer todo desde cero cuando volvía a la calle", relata a sus 87 años. Pasó otros cuatro años en prisión.
"Nunca usé la violencia", asegura. Ahora ve en la resolución del Consejo de Ministros "un paso en el buen camino". Después de toda la vida luchando por las libertades, tras la muerte de Franco se afilió a la asociación de ex presos de la dictadura, que hoy preside. Ayer no conocía exactamente "la dimensión de la medida", pero creía que cualquier documento oficial es "un reconocimiento explícito para siempre, para que al menos se valore el sufrimiento y las privaciones que durante tanto tiempo hemos tenido en la ignorancia y en el olvido".
Pero le gustaría un poco más. "Hay otros países, como Francia, donde los represaliados pueden viajar gratis en el transporte público y no pagan por otro tipo de servicios. Estaría bien como reconocimiento simbólico. Esto no nos solucionaría la vida, pero es un gesto más que al Estado no le costaría nada", explica.