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Reportaje:

Madrid y Barça se vuelven austeros

Los dos clubes piden un mayor control de los gastos internos ante la merma de ingresos

Austeridad es la nueva consigna en el Madrid y el Barcelona. Como es lógico, la crisis económica también afecta a los dos grandes clubes españoles. En el Barça prevén una caída en los ingresos por la venta de camisetas y la utilización del Camp Nou en la organización de eventos. En el Madrid, en cambio, no tienen constancia de que se hayan vendido menos camisetas, pero sí de que las listas de espera para tener acceso a los palcos VIPS se han reducido casi en un 30%. Ninguno de los dos clubes ha visto mermado el número de socios. En el Barça la renovación es automática si no se dice lo contrario y en el Madrid aseguran que ese dato es de los que "siempre crece" y este año rondan los 90.000. Tampoco ha habido despidos ni recortes de plantilla en los departamentos.

Las peticiones para los palcos VIPS del Bernabéu se han reducido el 30%
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Camisetas en crisis

Ha irrumpido, eso sí, la austeridad previo llamamiento generalizado al control de gastos internos. Se ha invitado a todos los empleados a "apretarse el cinturón". Traducido al lenguaje cotidiano: es el momento menos indicado para pedir un aumento de sueldo. Los controles en los gastos van desde el papel hasta los bolígrafos pasando por los post-it, el teléfono, la luz, los taxis, las comidas...

De nada parecen servir las cifras económicas que manejan ambas instituciones. El Madrid sigue encabezando la clasificación mundial de ingresos: en la temporada 2006-07 fueron 351 millones de euros por 315 del Manchester United y 290 del Barça. De esta campaña todavía no hay datos públicos, pero su presupuesto es de 400 millones. En el Barça, Joan Boix, vicepresidente económico del club, sostiene que los números de la entidad no peligran porque los grandes contratos -por los derechos de televisión o con firmas como Nike- se han firmado en 2008. Pero Boix también ha llamado a la austeridad al constatar que habrá un "ligero descenso de ingresos sobre los 380 millones previstos". Según vaticina, habrá "pequeñas desviaciones", caídas en fuentes de ingresos como "la venta de camisetas en las tiendas o la contratación de espacios del Camp Nou por parte de empresas para realizar eventos". El alquiler de palcos privados, apunta, "va bien, de momento", así como los abonos de temporada, que han sido renovados -vía domiciliación bancaria- en un 99% de los casos. Para compensar las desviaciones, la receta es la tijera: "Recorte de gastos de forma quirúrgica, a partir de un control exhaustivo, partida a partida", explica Boix.

Mientras que en el Camp Nou el alquiler de los palcos privados no se ha visto afectado, en el Bernabéu las empresas que quieran comprar el paquete del palco VIP ya no tienen que esperar meses y meses como ocurría antes. Es el dato que en la presidencia del Madrid más se destaca a la hora de analizar la crisis.

Por no haber no habrá ni inversiones en casa del Barça, según confirma el responsable económico: "No se realizará ninguna inversión en patrimonio si no es fruto de una partida de ingresos extraordinaria". Se refiere a la remodelación del Camp Nou, parada a la espera de que el Ayuntamiento concrete el nuevo planeamiento urbanístico de la zona. De él depende la futura venta de terrenos para financiar la operación.

La buena noticia de la semana para las arcas azulgrana es la liquidación del crédito sindicado de 92,5 millones de euros que solicitó la actual junta directiva en 2003, cuando llegó al poder. En estos años, la deuda del club se ha rebajado de 218 a 190 millones.

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